Iris Montenegro, Vicepresidenta de la Asamblea Nacional, indicó que al reformar la ley de Seguridad Ciudadana, mejorará la calidad de vida y erradicará pobreza en Nicaragua.
Foto Archivo La nueva iniciativa para reformar la ley de seguridad ciudadana, que introdujo el presidente de Nicaragua Daniel Ortega a la Asamblea Nacional (AN), es considerada por algunos políticos como un retroceso a la seguridad soberana.
La primera vicepresidenta de la AN, Iris Montenegro indicó que “lejos de lo que dicten ahora algunos políticos, la ley de Seguridad Ciudadana que introdujo el presidente, vendrá a fortalecer la seguridad de la población, misma que esta avocada al trabajo, al estudio y a los quehaceres del hogar, que necesitan tener tranquilidad y paz, para mejorar su calidad de vida y erradicar la pobreza en Nicaragua”.
“El objetivo de esta reforma es que las personas tengan un clima de estabilidad y seguridad en sus hogares, comunidades, centros de trabajo y la participación de la población tiene que ser, prever su seguridad, que es la que juega un factor determinante, esto permite controlar el peligro que podamos correr en alguna situación”, enfatizó la parlamentaria.
Nicaragua en el ámbito de seguridad, se encuentra en una buena posición, aunque hay amenazas en todos lados, recordó la diputada, “Tenemos que ser objetivos y sentirnos dichosos que tenemos voluntad política de parte del estado y de todas las instituciones vinculadas a esta temática por garantizar la seguridad a la población nicaragüense y a la soberanía de nuestro país”.
Por su parte el ex subdirector y comisionado general en retiro de la Policía Nacional, Francisco Bautista, explicó que esta reforma de ley es un proyecto facultativo del gobierno de Nicaragua, el cual es una responsabilidad del estado, en preservar la seguridad de los ciudadanos y del país en crear instrumentos jurídicos y organizativos que son necesarios para tal efecto.
Indudablemente los sectores políticos distintos tienen todo el derecho de estar incómodos o estar en desacuerdo en cualquier planteamiento, pero despojado de cualquier política el instrumento legal parece bien pertinente, resaltó Bautista.
En el caso de Nicaragua “todos sabemos que hay condiciones favorables, relativamente mejores que al resto de los países de Centro América, pero aun así necesitamos instrumentos sólidos, claros, estables con contenido técnico y que tengan una connotación de ley muy positiva que garanticen la seguridad ciudadana a largo plazo”, finalizó el ex subdirector Bautista.
NOTA DEL EDITOR: El diario La Jornada insta a los lectores a dejar sus comentarios al respecto del tema que se aborda en esta página, siempre guardando un margen de respeto a los demás. También promovemos reportar las notas que no sigan las normas de conducta establecidas. Donde está el comentario, clic en Flag si siente que se le irrespetó y nuestro equipo hará todo lo necesario para corregirlo.