Obama-Clinton
En EEUU las votaciones demócratas llegaron a su fin. Este partido ha tenido a nivel mundial las internas más largas (duraron 5 meses), más costosas (allí se gastaron cientos de millones de dólares), más participativas (sufragaron más de 30 millones de electores) y más enredadas (56 circunscripciones electorales votaron con fechas y mecanismos disparejos). Al final, pese a toda la fanfarria ‘demócrata’, la última decisión la han venido teniendo cúpulas: los abogados que decidieron darle la mitad de los votos a dos Estados cuyas internas fueron declaradas ilegales y unos cuantos súper-jefes partidarios.
Obama se convierte en el primer negro que será uno de los contendores para ser el gobernante más poderoso del mundo. Clinton podrá reclamar que a la postre ella sacó más votos aunque hoy puede estar queriendo cambiar su ambición. De haber sido la primera norteamericana en haber querido llegar a la presidencia hoy podría limitarse a presionar para entrar en la plancha de su rival ansiando ser la primera vicepresidenta en la historia de EEUU.
Ben y Beni
Las derechas en Israel y Bolivia tienen similares agendas pro-‘libre mercado’ aunque en la cuestión territorial proponen alternativas opuestas.
Ben Netanyahu fue premier israelí en 1996-96 aunque hoy puede volver al cargo encabezando a quienes no quisieran seguir dando más autonomía a los palestinos.
Bolivia Beni y Pando son los dos departamentos bolivianos dominados por los conservadores quienes el domingo votaron a favor del estatuto autonómico. Al igual que en Santa Cruz el Sí allí ganó con más del 80% de los votos aunque el gobierno reclama que dichos referendos son ilegales y tuvieron una alta abstención.
Si en Israel Ben Netanyahu podría remplazar al actual gobierno en crisis, en Bolivia el Sí de Beni es parte de una estrategia encaminada a minar al presidente izquierdista. Tanto la derecha sionista como la camba crecen azuzando temores en sus respectivas poblaciones (dentro de los hebreos ante el ‘terrorismo árabe’ y dentro de los bolivianos orientales ante el centralismo del 'socialismo indigenista').
Los aliados de Chávez no quieren que la Media Luna boliviana se autonomice por que no desean ‘enclaves neoliberales’ en sus repúblicas, pero si quieren ir a la separación palestina para socavar al principal aliado de Bush en el Medio Oriente.
Puerto Rico
En las internas de este ‘Estado Libre Asociado’ Clinton ganó 2 a 1 a Obama. Según Hillary dicha victoria mostraría que ella se recupera y que estaría ganando a nivel general más votos que su rival. Para Clinton Puerto Rico debería convertirse en el punto que revierta su derrota y atraiga a los súper-delegados.
Empero, allí hay varias paradojas. Puerto Rico (al igual que otras islas como las Vírgenes, Samoa o Guam) tiene derecho a votar por quienes sean los candidatos presidenciales de los partidos pero no por éstos en las elecciones generales.
Mientras Puerto Rico debe aceptar un gobernante por quien nunca vota, Hillary quiere que la decisión portorriqueña la vuelva a catapultar en la carrera presidencial.
Ella, además, arguye que su triunfo confirma que es la persona más apoyada por la mayor minoría de EEUU (los hispanos). Empero, ni ella ni Obama ni McCain hablan castellano. Ella, a su vez, ha sido rechazada por la mayoría de los portorriqueños que no desean ser asimilados como el Estado 51 de EEUU.