Fuentes de la inteligencia militar del Gobierno de Nicaragua tienen información de que hay una población México-Upala de Costa Rica  que están comprando propiedades y corriendo  los mojones de la frontera de Costa Rica hacia  territorio de Nicaragua, denunció el Coronel Ricardo Wheelock Román alto miembro del ejército nicaragüense. El Coronel Wheelock asistió a una conferencia de prensa convocado por la  Fundación alemana Konrad Adenauer ante periodistas de distintos medios de comunicación del país.

Expresó que en los próximos 20 años se tiene prevista una  crisis mundial por el agua potable y hay paises mundiales que están comprando propiedades en Centroamérica y América del sur en zonas donde hay agua. Recordó Wheelock que en la época de doña Violeta Barrios de Chamorro, 1990-1996, una ley fue vetada, relacionada con la cual se esclarecía que ningún extranjero podia tener propiedades a una distancia entre 20 y 25 kilómetros de la frontera, dijo el Coronel Ricardo Wheelock Román, director del Instituto de Historia militar del ejército de Nicaragua.

La urgencia de la aprobación y habilitación de la ley que fue vetada es de urgente necesidad ya que los ticos así  no tendrán  libre la posibilidad de comprar tierras que les permita ser propietarios para ellos y ningún extranjero de la  zona fronteriza con el Rió San Juan, sostuvo el Coronel Wheelock. Agregó  que esto podría convertirse en un problema serio, sostuvo. La actual situación en la frontera sur, Nicaragua- Costa Rica, es de la falta de control puntual donde solamente existen 10 puestos  militares fronterizos, sostuvo.

En el lado nicaragüense hay solamente selva y existe un único hotel, San Juan de la Selva, que cobra hasta 250 dólares por día. Lo complicado para llegar a la zona es permitido solamente por helicóptero y por embarcaciones, señaló el alto militar nicaragüense, quien abordó las dificultades y debilidades de la zona fronteriza sur de Nicaragua. En el sector según reveló el Coronel Wheelock  fueron encontradas unas ruinas indígenas que están siendo resguardadas por el ejército nicaragüense para evitar que sean saqueadas. No dio detalles de su ubicación.