El vocero presidencial, Linfolfo Monjaretz, dijo ayer en conferencia de prensa que dentro de tres meses el gobierno introducirá nuevas unidades de buses. Según Monjaretz esto es como parte de la promesa del mandatario de Nicaragua, Enrique Bolaños, en apoyar a los transportistas para sacarle más provecho al negocio del transporte.
Manifestó el funcionario público que si los diputados de la Asamblea Nacional no cumplen con lo establecido, entonces habrá un incremento en el precio de los pasajes. Con su mensaje, Monjaretz, hizo entender a los miembros del Instituto Regulador del Transporte del Municipio de Managua, Irtramma, a dialogar con los transportistas que desde ayer tienen paralizadas sus unidades y sólo un 50% anda en las calles.También señaló la posibilidad de que la regulación del servicio público pase nuevamente al gobierno central.
Por otro lado, el representante de los transportistas, Rafael Quinto, dijo que la amenaza de paro total para este próximo lunes sigue, hasta que gobierno decida y cumpla de una “vez por todas si deciden acatar los acuerdos establecidos”. Recordó que la idea de poner un impuesto al precio del combustible para subsidiar a los transportistas procedía del gobierno. 
