La muerte del célebre profesor Dionisio Herrera y Canales, ex fundador de la ex Federación Sindical de Maestros de Nicaragua, conmovió al mundo educativo de Nicaragua. Era un destacado escritor y docente. Originario de El Viejo, Chinandega, antiguo vecino de la Colonia 10 de Junio de Managua, sus últimos 28 años de su vida los dedicó a ser una persona dedicada a los Grupos de Alcohólicos Anónimos tradicionales, a los cuales dedicó parte de los últimos años de su vida.
Había adquirido el temple de la disciplina y dejo definitivamente el consumo del licor. Una vez me comentó que le llamaba la atención la existencia en Nicaragua de los Grupos de Sicoterapia de la línea del Dr. Ayala, GSA, y que le gustaría asistir a una sesión de los mismos. Un interés por una Filosofía que solamente él pudo entender y los que habiendo alcanzado la sobriedad saben de los enormes beneficios que significó para Dionisio ser una persona equilibrada y sana de pensamiento.
El destino le jugó una mala jugada a Nichito. Me parece que los efectos de su vida en el consumo de alcohol le afectaron y tuvieron secuelas en su hígado. Murió de cáncer en ese órgano vital. Solamente me toca recordarlo porque tuve oportunidad de platicar con él, una vez que la casualidad por no decir causalidad, me llevó en un ejercicio ciclístico que yo hacía en los alrededores de la Colonia 10 de junio de Managua, en la capital de Nicaragua en Centroamérica.
Me lo encontré sentado en la acera de su casa, leyendo el periódico, leyendo un libro, disfrutando con sobriedad su nueva vida. Optimista y recordando sus viejos artículos escritos en los periódicos y otras aventuras literarias. Solamente me toca recordarlo con alegría y sin tristeza porque hombres de la calidad de Dionisio Herrera y Canales se quedan siempre en el recuerdo y en el ejemplo de las presentes y futuras generaciones .Nunca es tarde recordar a un amigo profesor que falleció el pasado 15 de Marzo de este año 2006. La noticia de su muerte me conmovió grandemente esta madrugada y me hace pensar que todo pasa y la caravana pasa.
