Desde el pasado 27 de febrero del presente año, las autoridades costarricenses han advertido a unas 300 familias provenientes de Nicaragua a abandonar el precario Libertad II, mejor conocido como Managüita. Este desalojo que se dará podría provocar un profundo impacto social entre nicaragüense que se han ido a vivir ahí para buscar un mejor futuro económico para sus hijos y residentes en Nicaragua. Un “desalojo voluntario” habrá –supuestamente- el día de hoy, lo que significa que la gente deberá de irse por su propia cuenta.
Para las próximas horas podría darse un gran conflicto entre policías ticos y nicas inmigrantes, si estos, hacen caso omiso del llamado a retirarse de ese lugar, por ser una zona verde, donde debería de haber un parque para niños.
Sin lugar a dudas esto generará y desarrollará más xenofobia de los costarricenses. Hay miles de personas de Nicaragua que llegan a Costa Rica todos los años con muchos deseos de superación, este nuevo conflicto, provocará un desafío por desarrollarse más por parte de los Nicas.