El presidente de Honduras y el recién electo de  Nicaragua, Manuel Zelaya y Daniel Ortega  Saavedra se reunieron ayer durante dos horas en Tegucigalpa, la capital hondureña.  El asunto tratado por los dos políticos es el relacionado con las fronteras marítimas en la cual existe una controversia internacional en la Corte Internacional de Justicia de La Haya  , Holanda, desde 1999 cuando Nicaragua interpuso sus reclamaciones por 130 mil kilómetros de espacio marítimo en el Atlántico.  

El presidente Manuel Zelaya de Honduras dijo al recién electo Ortega de Nicaragua y llegaron a ese acuerdo de visitar juntos las zonas fronterizas de los dos países en el Golfo de Fonseca, en el Pacífico y la Mosquitia en el Atlántico. También se abordó sobre la integración, señaló. El mandatario hondureño dijo que las controversias limítrofes entre Honduras y Nicaragua se resolverán por la vía diplomática.  

El presidente electo de Nicaragua , Daniel Ortega  Saavedra, dijo que los un mil misiles SAM -7 que posee Nicaragua no son de largo alcance, tienen carácter defensivo y para defender el espacio aéreo. Se mostró de acuerdo con la destrucción de los cohetes tierra-aire siempre y cuando sean destruidos los aviones de combates que posee Honduras y El Salvador.  Eso lo declaró cuando era aspirante a la presidencia. Ortega Saavedra señaló en la reunión con Zelaya que en la temática defensa  y seguridad  debe de darse un “balance razonable de fuerzas” en el Istmo tal como se acordó en los Acuerdos de Esquipulas II, del 7 de Agosto de 1987. En ese tiempo se dio inició al fin de la guerra en la región centroamericana.  

Consideró que “gracias Dios “la situación de la zona centroamericana es distinta a los años 60, 70 y 80  que las caracterizó de “guerras y dictaduras”. Ortega Saavedra dijo que cuando asuma el 10 de Enero próximo planteará para que en la región  “se inicie un proceso de desarme”. Manifestó que los países de Centroamérica deben de combatir la pobreza y el hambre. Ese flagelo afecta al 4,2 de los 6 millones de nicaragüenses, señaló. Sobre los problemas limítrofes dijo: “es una desgracia que estemos arrastrando diferencias limítrofes”, refiriéndose a la zona de Centroamérica y del Hemisferio. Enfatizó: “Resulta un absurdo un absurdo el estar confrontándonos y enfrentándonos por problemas limítrofes, incluso tener que llegar hasta la Corte Internacional de Justicia para tratar de dirimirse estos conflictos que no deberían de existir”.