Ya fue promulgada una ley por el presidente norteamericano George Bush que asigna parte de los fondos para la construcción de un muro en la frontera entre EE.UU. y México de más de un mil 126 kilómetros. El mandatario norteamericano considera que el muro impedirá la entrada ilegal a territorio estadounidense de inmigrantes indocumentados.
En el presupuesto de gastos para el año fiscal 2007 se contempla los fondos para el Departamento de Seguridad Nacional que se destinarán para evitar la entrada de ilegales. Se espera que Bush firme otra ley que asignará una partida presupuestaria para dar inicios a la construcción del gigantesco muro fronterizo. Esta situación generó reacciones del gobierno de México quien esperaba reformas significativas a las leyes migratorias en Estados Unidos.
