La diputada Xochilt Ocampo del Frente Sandinista reapareció ayer nuevamente de presentadora de televisión en el canal 10. Es un caso extraño. Muchos seres humanos entre sus máximas realizaciones están llegar a ser diputados o el de ocupar un cargo público si se meten a la vida política. Sin embargo, llama mucho la atención el hecho de que Xochilt haya preferido estar leyendo noticias de notas rojas en vez de mantenerse en el peldaño superior al que llegó por el voto popular, ya que no podrá responder ante las expectativas de sus electores. No se sabe si renunció al cargo de diputada propietaria para irse a ganar un sueldo bajo en un canal de televisión, ya que el salario que puede pagarle un medio nunca podrá equipararse al que podría recibir como diputada. Además de que su voto es decisivo para el país.
Las preguntas que surgen sobre este caso son variadas pero especulativas. No se sabe si fue marginada de las grandes decisiones en el parlamento o no quiso sujetarse al sistema de mando que impera en las resoluciones políticas de cada Partido representado en la Asamblea Nacional. Xochilt Ocampo fue una de las diputadas que más votos y aceptación tuvo de parte de la consultas y votaciones partidarias a lo interno del Frente Sandinista encima de Yáser Martinez ex –dirigente universitario del 6 por ciento. La verdad que es ella misma la que tendrá que aclarar su situación. Solamente veamos algunos ejemplos.
El ex presidente de EE.UU. Ronald Reagan de actor de cine llegó a la cima de convertirse en mandatario. El actual embajador de El Salvador en Nicaragua, Francisco Imendia, fue presentador de noticias y de ahí salió al mundo político y diplomático para nunca más volver al periodismo televisivo. Ahora vemos el caso del FMLN de izquierda de El Salvador. Esta aprovechando la imagen que se creó el periodista Manuel Funez, como periodista famoso, para proyectarlo como futuro candidato presidencial. Cuál será el destino de Xochilt entonces? No supo o no entendió a qué se metía cuando se lanzó a ser diputada de un partido tan importante como el FSLN? Solo ella y su conciencia podrán responder. Nosotros como periodistas hacemos los comentarios. |