Luego del fallo que dictara la Corte Internacional de Justicia de La Haya sobre el conflicto jurídico y marítimo entre Honduras y Nicaragua desde hace 7 años, el cual favorece a los dos países, el Presidente hondureño Manuel Zelaya y el mandatario Nicaragüense Daniel Ortega Saavedra-, cumplieron su palabra de reunirse para abrazarse en la Frontera que divide ambas naciones.
Durante su intervención Zelaya, mencionó que “se equivocaron nuestros adversarios el fallo de La Haya ha unido a Centroamérica”.
Ortega, en sus declaraciones dijo “demos gracias a Dios por esta hermandad”, refiriéndose a que en el mundo lo que hace falta es la “hermandad y el amor” a causa de “los grandes intereses de los poderosos, la inmensa riqueza que concentran los poderosos y la inmensa pobreza que sufren los pueblos en el mundo”.
El encuentro se dio en Ocotal, localidad ubicada al noroeste del país, capital del departamento de Nueva Segovia, junto a la frontera con Honduras. En el lugar se podía apreciar un gran fondo sobre la tarima que decía “Gracias a Dios por esta hermandad”.
Por otro lado, el gobernante de El Salvador Antonio Saca, llamó a ambos mandatarios para felicitarlos por la forma en que estaban actuando.
Ortega Saavedra dijo que después del acto celebrado se pondrían a trabajar “en las comisiones para el desarrollo del Golfo de Fonseca” el cual las tres naciones El Salvador, Honduras y Nicaragua firmaron acuerdos para no recurrir ante La Haya.