Mi más fraternal y hermoso saludo a todos los hijos del planeta Tierra que, en estos instantes, estáis contactando con estos mensajes interdimensionales que el mundo espiritual está trasmitiendo en este espacio cibernético que a vosotros tanto os agrada.
Hoy voy a hablaros de algo que muy pocas personas saben, incluso dentro de los registros esotéricos, y que nosotros solemos impartir e inculcar a nuestros discípulos más leales y seguidores incondicionales, porque deseamos haceros partícipes de estas gracias que, desde los planos superiores, siempre buscan un medio de expresión óptimo para su materialización.
Existe un gran contingente de seres que, fraternalmente, están cooperando y activando todos los nuevos patrones vibratorios y energéticos que se están inyectando en la Tierra, pero, además, tenemos que analizar cómo y quiénes están participando en todo este gran evento de salto evolutivo en vuestro planeta. Es obvio que existe una gran irradiación procedente del Cinturón de Fotones, o línea Bond, que está impactando todos vuestros campos unificados. Pero además existe otro factor que es muy importante y a tener en cuenta, que es la intervención e intercesión de los Maestros Ascendidos que, conjuntamente, estamos colaborando para que todo este acontecimiento planetario y cósmico llegue a buen puerto.
Todos los eventos planetarios que están acaeciendo, y seguirán aconteciendo en vuestro planeta, no son algo incidental, sino más bien fenomenal y causal, todo ello bajo la dirección y supervisión atenta de legiones de seres que están destacados para llevar a cabo semejante misión. Y aquí es también donde entran en juego las fuerzas o energías de seres como nosotros, los Maestros Ascendidos, que somos responsables directos y estamos plenamente implicados en toda esta trama de transformación que se está produciendo en la Tierra.
Nosotros, conjuntamente con miríadas de seres y nuestros discípulos del orden interno más leales, estamos emitiendo toda una serie de irradiaciones magnéticas y electrónicas que proceden de nuestros seres superiores o Presencias Divinas, que, como catalizadores cósmicos, están reconduciendo y transmutando las altas frecuencias radiactivas de la línea Bond, y sino fuera por nuestros filtros transmutadores, pondrían en peligro la estabilidad no sólo magnética de la Tierra, sino la vida en sí.
Nosotros, como responsables directos de todo el Gran Evento de Transformación Evolutiva que se está produciendo en la Tierra, tenemos que supervisar, analizar y evaluar hasta qué punto todos vosotros y la Tierra, podéis integrar la nueva codificación vibratoria, que será el gran detonador de una nueva realidad dimensional, así como también evolutiva. Y es ahí que, a través de nuestras presencias YO SOY, estamos decodificando la sustancia luz-creadora para repolarizar todas las partículas onda y electrónicas que están bombardeando los campos unificados no sólo de vuestro planeta, sino también de vuestras células y átomos. La gran transformación que se está realizando a pasos agigantados, y esto será cada vez más obvio y desconcertante para vuestros científicos, que observarán atónitos e impotentes cómo grandes cambios genéticos y magnéticos activarán todos los procesos biológicos, geofísicos y electromagnéticos de la Tierra y su humanidad.
Evidentemente, la Sustancia-Luz creadora de la que estamos hablando no sólo tiene una connotación meramente científica, sino que su simbología más profunda y cósmica es el AMOR, que es lo realmente está activando nuestras vidas. Pero todos vosotros, y dependiendo del nivel evolutivo y percatación consciente y ampliación de la conciencia, lo traducís en datos que son más afines a vuestra idiosincrasia, necesidades evolutivas y objetividad espiritual. Es por eso que nosotros estamos llevando a cabo una campaña de divulgación masiva donde las barreras conceptuales, filosóficas y religiosas den paso a una nueva actitud e ideología universal, donde la realidad pueda asentarse armónicamente en cada uno de vosotros, generando una espiral de comprensión y cohesión espiritual que genere esos sentimientos y datos emocionales que habéis ido recopilando en cada encarnación.
Todos y cada uno de vosotros es una antena de recepción y emisión, y una poderosa central de transformación evolutiva que debéis de activar y sintonizar con las nuevas frecuencias energético-vibratorias que se están implantando en vuestro planeta. Los Maestros Ascendidos estamos periódicamente efectuando una serie de sondeos planetarios a través de vuestros Logos Planetarios y de la Fraternidad Blanca, que son los que dirigen todo el proceso de salto evolutivo para ver hasta qué punto la humanidad está dispuesta a integrar las nuevas cargas evolutivas que se están depositando en núcleo magnético de la Tierra. Nuestra misión es sumamente delicada, porque tenemos que saber con gran precisión hasta qué punto vuestra parte humana, así como también divina, está dispuesta a colaborar e integrar los nuevos patrones que os permitirán acceder a nuevas realidades, experiencias y descubrimientos para la integración cósmica con los demás planetas y civilizaciones de vuestro Sistema Solar y otros puntos del Universo.
Nuestra Sustancia – Luz Creadora es la Gran Fuerza Centrípeta que emerge incesantemente del Corazón de Dios Infinito, y que pulsa cada partícula y electrón del Universo para generar una onda expansiva ad infinitud. Donde todos converjamos en ese gran punto de exhalación – inhalación cósmica, que nos mantendrá para siempre unidos en la Unidad Universal de todas las Células Cósmicas que están poblando y experimentando la evolución en el Universo. Los Maestros, como una prebenda especial y un acto de sacrificio divino y desinteresado, estamos ofreciendo el cáliz de nuestras Presencias Divinas para que la Gran Alquimia del Espíritu Divino y Redentor del AMOR se ancle en los corazones de toda la humanidad que, sedienta, confusa y perdida, vaga sin rumbo en estos momentos de transición evolutiva.
Es motivo de esfuerzo hercúleo por nuestra parte el inyectar esa sustancia-Luz que, como una gran corriente impelente, está activando y desplegando todo su potencial para redimir y trasmitir al Ser Humano que los tiempos del oprobio, la perversidad, la incomprensión, la violencia, la explotación, la guerra y las diferencias sociales han finalizado. El colectivo humano como tal tiene que hacer frente al reto que supone integrar los nuevos valores acuarianos que, desde las Altas Esferas, están descendiendo vertiginosamente para posicionarse en las mentes y corazones de todas personas que humilde y sinceramente deseen un nuevo renacimiento y despertar a la plenitud del vibrar espiritual. Es por eso, amados hermanos del Cosmos, que las huestes angélicas, en colaboración con los Maestros Ascendidos y las fuerzas extraterrestres, estamos desarrollando una Gran Plan de Acción Divina de Transformación, que ya es ineludible e inminente. Y podemos garantizaros que nuestros esfuerzos conocerán el éxito, a pesar de las renuencias y oposición de algunos sectores humanos, que todavía no son conscientes de que los días del oscurantismo, el terror, el caos y la destrucción están a punto de finalizar.
A nosotros nos supone un esfuerzo sobrehumano el hecho de actuar como decodificadores o inversores de esta marea radiactiva que está siendo expelida desde el Centro Plasmático de vuestra Galaxia, y como muros de contención y transmutación tenemos que arriesgar la estabilidad de nuestros cuerpos electrónicos para que, con nuestro sacrificio, vuestra humanidad pueda entrar en el nuevo ciclo evolutivo de la Paz, del Amor y el Servicio Fraternal y Solidario entre las criaturas. Desde los Dominios Superiores del Universo está descendiendo como una gran avalancha de Luz las Bendiciones de los Grandes Jerarcas que, como representantes del Poder Supremo, desean agraciar a la humanidad tan deteriorada, confundida y perdida de vuestro planeta.
Con todo esto, amados seres planetarios, lo que intento trasmitiros es el sentir y pulsar de los Maestros que, con gran compasión, comprensión y condescendencia desean que seáis partícipes de la Nueva Humanidad y configuración planetaria en el Tercer Milenio. Si nosotros nos estamos sacrificando tanto para que esto suceda, también os rogamos humildemente que hagáis vuestra contribución a la causa, porque, en última instancia, de lo que se trata no es de establecer una situación que redunde en el bienestar de unos pocos, sino más bien en el futuro de las generaciones de seres que vendrán a formar parte de los nuevos campos de monitorización para otras civilizaciones de otras zonas del Universo. Es decir, hacerlo ya no sólo por vosotros o el planeta Tierra, sino también por otras civilizaciones y estabilidad y crecimiento armónico de vuestro Sistema Solar y Galaxia, así como de los Mundos Paralelos al vuestro.
No estamos aquí para pediros algo que esté fuera de vuestras posibilidades, sino para que recapacitéis y hagáis uso de ese gran potencial de transmutación que ocultáis en lo recóndito de vuestro ser, pero que permanece inactivo. Todos los esfuerzos que efectuáis diariamente para poder subsistir, podrías canalizarlo, aunque fuera una parte de ello, en la consecución y apoyo de esta gran corriente transmutadora que está descendiendo desde nuestras Presencias Divinas. Yo os digo que si hacéis esto, grandes logros obtendréis no sólo a nivel personal, sino también colectivo y planetario, porque la acción conjunta es la tónica dominante en el Universo y que redunda en toda la maquinaria cósmica.
Cualquier tipo de trabajo espiritual que hagáis debéis de sintonizarlo con nosotros, invocando nuestros rayos y energías transmutadotas, para que se produzca una progresión geométrica de nuestras fuerzas y así el impacto sea mucho mayor. Esto requiere de un gran sentido de la percatación consciente y de sentir profundamente que vuestra contribución es necesaria, y que no esperáis a que todo proceda del exterior sin vuestra intervención. Todos estamos implicados en esta trama evolutiva, y los más afectados obviamente sois vosotros, pero nosotros, desde nuestra profunda compasión y compresión, deseamos realizar este servicio para favorecer a vuestra humanidad y al planeta Tierra. Lleváis muchos ciclos evolutivos adiestrándoos en las aulas de la Tierra, y ahora lo único que se os pide justamente es que, en base a vuestra sensibilidad espiritual y humana, os alineéis con nosotros y con vuestro planeta para que la transición sea todo un éxito y lo menos lesiva posible. Son muchos los que ya se están haciendo eco de los momentos críticos por los que está pasando vuestro planeta, y nosotros deseamos hacer un llamamiento a vuestros corazones y mentes superiores para que, todos juntos, caminemos hacia la nueva expresión evolutiva que la Era de Acuario ha venido a implantar.
Los trabajos espirituales cotidianos deben de incrementarse y buscar cada vez un poco más d tiempo para estos menesteres espirituales, y cuando estéis plenamente sumergidos en ellos, solicitar e invocar la conexión con la Tierra y con todos nosotros, que requerimos de conversores de energía radiactiva para que el planeta logre emerger a la nueva expresión vibratoria por la que tantos eones ha estado esperando.
Ahora ha llegado el momento de que mostréis vuestra gratitud, amor y servicio a este ser planetario que tanto ha hecho por vosotros permitiéndoos que descubrieseis y experimentaseis la realidad espiritual que lleváis oculta en vuestro Interior. Todos vosotros estáis endeudados con la Madre Tierra, que tantas vidas os ha facilitado, los medios y cuerpos para que pudierais desarrollar vuestros procesos evolutivos y kármicos. Ahora es justo que cada uno de vosotros. Como células orgánicas y partes del todo, apoyéis incondicionalmente su metamorfosis, ya que ésta os afectará plenamente por ser partes integrales de ella.
Para esto, amados luceros, debéis de despojaros de ese aspecto egocéntrico que habéis ido cultivando hasta el momento presente, y en su lugar exhibir ese profundo sentimiento de desprendimiento y generosidad incondicional que todo ser armonizado y divino manifiesta en su constante pulsar evolutivo. Si os estamos hablando es estos términos no es porque sea algo trivial o circunstancial, sino más bien prioritario, importante y apremiante. No deseamos fomentar ningún sentimiento apocalíptico en nuestros mensajes, pero sí una toma de conciencia y necesidad urgente de activar todo vuestro poder y capacidad creativa para que la canalicéis hacia la Tierra y hacia todos los demás semejantes que, como vosotros, comparten la nave Tierra. Es por eso que, una vez más, os rogamos humildemente y decimos que el futuro está en vuestras manos, y que nosotros estamos dispuestos a apoyar sin reservas esta transición o iniciación planetaria y humana que se está produciendo, y que os llevará a experimentar los grandes cambios que todos vosotros habéis anhelado durante vidas, y que ahora se consumarán como un hecho inexorable e inminente. Todos sois muy amados por nosotros, pero esperamos que un mínimo de reciprocidad y gesto de colaboración se produzca en cada uno de vosotros, porque el Universo y la Divinidad desean percibir esa buena voluntad y actitud de colaboración en todos sus hijos que están dispuestos a obedecer y cooperar con el Plan Divino.
Que las flamas de Luz de los Maestros se derramen sobre todos vosotros, y esperamos que mis palabras inspiren lo más profundo y hermoso que hay en vuestro interior, y que es vuestra angelitud y divina. Se despide devotamente y con todo mi amor, Pablo Veneciano.
Fin de la Transmisión.