La violencia en Francia cada día que transcurre es más creciente. Durante los comicios presidenciales un total de 270 ciudadanos fueron detenidos y 367 vehículos fueron incendiados por asonadas ocurridas durante el día que se celebraron las elecciones que elegirían al nuevo mandatario francés, según cifras divulgadas por la Dirección General de la policía Nacional (DGPN).
Según la DGPN este resultado es un poco superior a la devastación de autos que causó la Fiesta Nacional del 14 de julio del año pasado 2006, pero las cifras son inferiores a la cantidad de destrucción vehicular que se registra durante los meses de diciembre de los últimos años.
Durante la elección presidencial se detectaron combates callejeros contra los agentes del orden en París, capital francesa, mejor conocida como la del Amor. Los mayores incidentes ocurrieron en la plaza de la Bastilla, el lugar tradicional de las celebraciones populares.
De acuerdo a la DGPN, los manifestantes arrojaron a los oficiales desde adoquines hasta pupitres escolares. Otros lugares donde ocurrieron disturbios similares fueron Lyon, Marsella, Lille, Burdeos, Toulouse, Nantes o Rennes.