Caracas --- El presidente venezolano, Hugo Chávez, dispuesto a mejorar sus relaciones con un nuevo gobierno de EE.UU. ya que con George Bush, el Presidente Venezolana dijo que “no vale la pena”.
Afirmó Chávez: "No vale la pena mejorar las relaciones con un presidente que ha amenazado, hace unos días, con una tercera guerra nuclear (...) que tiene bombas atómicas, ordena invadir países, matar gente", sostuvo Chávez durante un acto oficial en Caracas.
Afirmó el mandatario venezolano que esta semana se reunió con el nuevo embajador de EE.UU. , Patrick Duddy, y que le expresó al diplomático esa esperanza suya de mejorar los nexos de su Gobierno "revolucionario" con una nueva futura administración norteamericana.
Afirmó Chávez lo siguiente: "Ojalá venga un presidente con el que se pueda hablar, discutir los temas del mundo, los temas bilaterales mundiales (...) y que nos respeten, ¡porque no serenos más nunca colonia de EE.UU. y de nadie!", manifestó el jefe de Estado e impulsor del socialismo del siglo XXI.
Detalló que se reunió con el embajador Duddy y su esposa, a quienes recibió con un "welcome to this country, welcome", según reveló Chávez, al reiterar que su Gobierno quiere tener "buenas relaciones con todo el mundo".
Chávez volvió opinar que el "imperio va a caer este siglo" XXI, que ese supuesto derrumbe "ya comenzó" en la parte "moral", y que prueba de ello es la "derrota" que "Cuba y el mundo" le dieron al Gobierno de Bush, al nuevamente condenar en la ONU el bloqueo a la isla caribeña.
Duddy dijo el lunes pasado, tras presentar sus credenciales al presidente venezolano, que trató con él una "amplia gamas de temas" y "la manera de mejorar la colaboración" bilateral.
"Tuvimos una muy buena conversación. Tratamos una amplia gama de temas y espero trabajar en este lindo país para el bienestar de nuestros dos pueblos hermanos. Creo que fue un buen comienzo", declaró el diplomático a los periodistas.
Venezuela y Estados Unidos han mantenido unas difíciles relaciones diplomáticas desde la llegada al poder de Chávez, en 1999, salpicadas de amenazas de ruptura que no han llegado a concretarse.
