Los asuntos sexuales no deberán ser un tema para discutir a “puertas cerradas en los hogares” debido a que sería una buena táctica social contra el aumento en los casos del VIH y el SIDA entre la juventud nicaragüense, según Mario Chamorro, Director Ejecutivo del organismo Dos Generaciones.
El problema es que los adultos piensan que los niños y adolescentes no les interesa opinar sobre temas sexuales, y es al revés, porque “no vemos que sexualidad es desde que el niño pone su mano dentro del pañal porque siente que eso le da placer”, explicó Chamorro. “Eso tiene que ver con una visión que tenemos los adultos, de pensar que los niños o los adolescentes no están interesados en su sexualidad o en su vida sexual”, manifestó Chamorro.
Según un estudio llevado por el Consejo de la Juventud de Nicaragua, jóvenes de las edades de los 16 y 21 años, habían iniciado a los 10 años de edad sus relaciones sexuales, y a los 21 años, habían tenido hasta 56 experiencias con distintas personas.
En esta encuesta se realizaron 395 entrevistas, 225 de los entrevistados aseguraron haber iniciado una vida sexual, del cual 36 por ciento inició hace 3 o más años atrás, siendo en su mayoría los varones, de 10 a 14 años, en su mayoría.
Ante estos resultados, Chamorro señaló que el riesgo es la poca información en temas sexuales porque los jóvenes que inician sus relaciones sexuales desde muy temprana edad, ni en sus familias les hablan del tema, mucho menos personas ajenas.
Un consejo para las personas que lean este artículo es que a los niños se les “debe enseñar dónde están sus genitales, que nadie se los debe tocar, y que se genera placer cuando se tocan”, concluyó Chamorro.