El jefe de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), Jacques Diouf, estima que a raíz de las violentas protestas del alza de los alimentos hay solo una señal de catástrofes nacionales que perjudicarán al mundo entero si no se replantean e incrementa la ayuda a la agricultura.
Porque según dijo Diouf "lo que vemos hoy es sólo una señal precursora. Si dejamos las cosas tal como están, corremos el riesgo de tener catástrofes nacionales en los países afectados , que tendrán un mayor impacto en la estabilidad del mundo entero".
Diouf lamentó que "la ayuda al desarrollo en el sector agrario haya sido dividida por dos entre 1992 y 2000" y que el Banco Mundial (BM) "desde el inicio de los años 1980 haya reducido drásticamente sus gastos para la agricultura".
Por tal motivo el representante de la FAO reclamó que se incremente de emergencia el nivel de asistencia a la agricultura para de esa forma ayudar a las naciones a "compensar el alza de los precios" de los productos alimenticios básicos, e insistió en repensar la estructura de las asistencias.
Al causa de la alza en los precios de los alimentos básicos, varios países pobres atraviesan crisis alimentaria, por lo cual en los últimos meses en Haití, Camerún, Costa de Marfil, Etiopía, Egipto, Indonesia y Filipinas, entre otros países, se levantaron violentas protestas.
Diouf, brindo estas declaraciones al semanario alemán Die Zeit en su edición digital.