El cambista José Tomás Pineda Zelaya, de 57 años, conocido popularmente como “Avena”, originario del departamento de Chinandega, fue asesinado brutalmente de trece machetazos en el cráneo, hombro derecho, y dos de sus dedos: el índice y el pulgar.
Según la señora Julia Elena Torres, quien lavaba la ropa del cambista contó que a un poco más de las 9 de la noche del viernes 4 junto a su esposo, Edwin Ramón Álvarez y varios vecinos, tocó la puerta principal de la vivienda de Pineda Zelaya, la cual estaba abierta, pero la siguiente entrada estaba bajo llave, por lo que la abrió de un puntapiés.
Agregó que encontró a su vecino doblado en la cama, en un charco de sangre, con el zíper del pantalón abierto, la faja suelta y sin camisa.
La testigo aseguró que Pineda Zelaya no tenía enemigos, no ingería licor, pero en los últimos días había introducido a tres mujeres desconocidas a su casa.
Según Torres, a las tres de la tarde del viernes el cambista fue visto en su motocicleta con una mujer hermosa, piel morena, de unos 20 años, quien vestía blusa verde y pantalón azul.
“Él me solicitó que le comprara unas bolsas de hielo, vi a la mujer y me escondió la cara, parece que le daba pena porque estaba con un hombre mayor o tenía interés en hacerle daño a mi vecino”, expresó Julia Elena, quien trasladó el cuerpo a su vivienda, el cual fue retirado por Gisel Pineda, hija del cambista, la que sepultó a su padre en su natal Villa Nueva.
Torres aseguró que hace ocho meses una mujer originaria de El Jicaral, León, drogó al cambista introduciendo un somnífero en un vaso con avena que le dio a beber, luego le robó una considerable cantidad de dólares y un arma de fuego.
El comisionado Alejandro Ruiz, jefe de la Dirección de Auxilio Judicial de la Policía Nacional, DAJ-Chinandega, informó que investigan el homicidio ocurrido entre las cinco y seis de la tarde del viernes, cuyo móvil aparentemente es el robo. |