En la histórica visita del Presidente de Nicaragua Daniel Ortega Saavedra a Honduras para presenciar el acto oficial de adhesión de ese país a la Alternativa Bolivariana para las Américas (Alba),  un grupo de mujeres pertenecientes a organizaciones feministas protestaron por la presencia   del mandatario nicaragüense a la Casa Presidencial.

Vestidas de negro, con mantas alusivas que rechazaban la visita de Ortega y con fotos impresas en banners publicitarios con la figura de su hijastra Zoilamérica Narváez –que lo denunció en 1998 por supuesta violación– estuvieron presentes durante el ingreso del nicaragüense al palacio presidencial hondureño.

Las organizaciones Movimiento de Mujeres por la Paz "Visitación Padilla", Centro de Derechos de Mujeres, Centro de Estudios de la Mujer y otras agrupaciones expresaron su  protesta.

La dirigente del “Visitación Padilla”, Gladys Lanza, lamentó el hecho que el presidente nicaragüense visite Honduras, dado que todas se sienten a como se estuvo sintiendo Zoilamérica cuando se dio el abuso de ella durante 20 años, según la denuncia interpuesta en 1998 .

Lanza explicó a la prensa que mostraron esas imágenes porque “la foto de Zoilamérica es la que debe prevalecer en este acto, todas nos sentimos Zoilamérica”. Agregó que “estamos totalmente en contra de que (Ortega) sea testigo” del acto donde el presidente de Honduras, Manuel Zelaya, firme la incorporación de este país al Alba, dijo.