El gobierno de Bolivia informó un supuesto plan de magnicidio contra el presidente Evo Morales y responsabiliza que el atentado "provendría de organizaciones de extrema derecha".
El anunció lo hizo el ministro de Gobierno (Interior), Alfredo Rada, quien detalló que el plan que se ejecutaría sería “aprovechando concentraciones con movimientos sociales que apoyan al gobierno" para "efectuar el atentado", aseguró y recordó que el gobernante tiene "una agenda en la que diariamente está en contacto con organizaciones sociales, con sectores sociales".
Rada, aunque no precisó nombres, manifestó que quien "ejecutaría el plan" sería una persona "de extracción popular o campesina" para desorientar a los servicios de seguridad de Morales.
Y que "el discurso que justificaría el atentado, sería decir que el presidente habría traicionado a las bases sociales campesinas que lo llevaron al poder y que por lo tanto, al haber llegado a acuerdos con la derecha, sería una reacción de algún sector social", precisó el ministro.
El plan lo detectaron los organismos de inteligencia hace algunos días, e informaron de inmediato al gobierno.
Oposición “no hay plan”
El senador opositor de Poder Democrático Social (Podemos), el conservador Luis Vásquez manifestó que no se van a mostrar detalles del plan "porque no hay nada" e indicó que el "presidente Chávez tiene dos recursos de tipo mediático para desviar la atención de los pueblos. Por un lado hay un intento de muerte en contra de él o de otro presidente, el caso del presidente Evo Morales, o en otro caso está decir que el gobierno de Estados Unidos planea un golpe para desestabilizarlo", acotó.
Y el diputado de Unidad Nacional (centro derecha), Arturo Murillo, aseveró que la denuncia "ya parece un disco rayado y hay que dejar de alarmar a la población " ya que "durante tres años hemos escuchado lo mismo: intento de asesinato, me van ha matar, me voy a morir, pero no se ve ni se presentan pruebas de que alguien quiera matarlo".