WASHINGTON.- El gobierno de Estados Unidos volvió a señalar al grupo islámico Hamas como responsable por la escalada de violencia y por los bombardeos israelíes a la Franja de Gaza, y anunció que se puso a trabajar con el objetivo de lograr una "tregua duradera".
Aunque expresó preocupación por la situación humanitaria en Gaza, donde los bombardeos causaron hasta más de 340 muertos, uno de los portavoces de la Casa Blanca, Gordon Johndroe, dijo que las acciones de las fuerzas israelíes fueron "en respuesta a los ataques con cohetes y morteros" contra su territorio.
"Hamas demostró una vez más su verdadera naturaleza de organización terrorista que hasta rechaza reconocer el derecho de Israel a existir", dijo el vocero en Crawford, Texas, donde el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, está pasando las fiestas de fin de año.
Johndroe agregó que el gobierno israelí aseguró a Washington "que no tiene intenciones de reconquistar Gaza" e informó que, en las conversaciones entre ambas capitales, las autoridades norteamericanas reclamaron los máximos esfuerzos para "evitar víctimas civiles" en la Franja.
Por su parte, el presidente electo, Barack Obama, se mantiene en silencio sobre la situación, que deberá afrontar, de todas maneras, cuando llegue a la Casa Blanca, el 20 de enero próximo.
El equipo de transición dijo que Obama está siendo informado, en forma permanente sobre la situación en Gaza por parte de altos funcionarios del gobierno saliente.
Sin embargo, recordaron, Obama considera que "Estados Unidos tiene un solo presidente", y evita comentar los sucesos de Medio Oriente.