TEGUCIGALPA.- Las Fuerzas Armadas de Honduras iniciaron la devolución de un arsenal almacenado desde hace 22 años, para utilizarlo en un eventual enfrentamiento con Nicaragua durante la época de la Guerra Fría.
El vocero de las Fuerzas Armadas, coronel Ramiro Archaga, dijo que el armamento consiste en 4.600 fusiles FAL y 800 AK-47, 30 cañones de 20 milímetros con cajas de repuestos, 2.500 cohetes y 48 cohetes RPG-7 y centenares de cajas de municiones.
El coronel indicó que los primeros cargamentos fueron enviados en barco a Miami a principios de diciembre en 10 contenedores desde Puerto Cortés, en el Caribe, y el resto del armamento será enviado entre enero y febrero. Las Fuerzas Armadas recibieron el arsenal en 1986 de la empresa panameña Longlac Enterprises, subsidiaria de la compañía Sanco Global Arms, con sede en Miami.
El armamento fue depositado para su custodia en el Comando de Apoyo Logístico del Ejército, ubicado en Naco, departamento de Cortés, norte de Honduras, y su traslado a Estados Unidos se realiza en un "prudente secreto, porque es una operación de alto riesgo", dijo Archaga.
Un periódico local informó que las armas fueron enviadas a Honduras con la intermediación del cubano-estadounidense Mario Delamico, calificado por Nicaragua como terrorista en la década de los 80.