La Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya aún no estableció plazos para continuar conociendo sobre el conflicto en el Mar Caribe entre Nicaragua y Colombia, según dijo ayer una fuente oficial. El canciller de Nicaragua, Samuel Santos López, informó de que la presidenta de la CIJ, Rosalyn Higgins, celebró una breve reunión ayer lunes en La Haya con los representantes de Nicaragua, Carlos Arguello, y el de Colombia, cuyo nombre no fue dado a conocer.
El alto responsable de la política exterior de Nicaragua en Centroamérica dijo a los medios periodísticos en una rápida reunión que La Corte Internacional de Justicia, CIJ, informará en los próximos días en qué fecha Colombia deberá contestar la demanda de Nicaragua presentada en el 2001.
Santos también dijo a los periodistas que hoy se estará en Nueva York para presentar al Secretario General de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, la posición de Nicaragua sobre el fallo de la CIJ en diciembre pasado.
El Canciller de Nicaragua será recibido por Ban Ki-mon el próximo miércoles.
Santos dijo que al secretario general expresará "la actitud cerrada y absurda de Colombia" en relación con la sentencia de la CIJ el 13 de diciembre pasado.
El canciller dijo que Nicaragua, tras entregar una carta con la posición de su país, se reserva la opción de entregar esa postura ante el Consejo de Seguridad de la ONU.
Santos ofreció estas declaraciones luego de reunirse con su homólogo hondureño, Edmundo Orellana, que le hizo una visita de cortesía.
El pasado 13 de diciembre la CIJ se declaró competente para dirimir el conflicto que mantienen Bogotá y Managua sobre su frontera marítima en el mar Caribe.
No obstante, la CIJ reconoció que el Tratado Esguerra-Bárcenas de 1928-1930 estableció la soberanía de Bogotá sobre las islas San Andrés, Providencia y Santa Catalina, por lo que se declaró sin jurisdicción para resolver esta cuestión.
El diferendo incluye, sin embargo, otras cuestiones territoriales como la soberanía de los cayos Roncador, Quitasueño y Serrana, manejada ahora por Colombia y que Nicaragua reclama. |