Granada, Nicaragua.- La plaza de la libertad de Granada fue el escenario perfecto en el que cientos de granadinos se unieron juntos a poetas nicaragüenses y del mundo para dar por inaugurado de manera oficial el IV Festival Internacional de Poesía de Granada 2008.

Francisco de Asís Fernández, Presidente de este evento agradeció el decidido apoyo de la comunidad empresarial así como a los medios de comunicación, poetas nicaragüenses y del mundo que con su presencia y esfuerzo han vuelto realidad por cuarto año consecutivo esta puesta en escena de la poesía del mundo, la que tiene por objetivo ser la más grande de América en un escenario magnífico como es Granada.

Esta celebración también tiene como objetivo lograr el reconocimiento de Granada como patrimonio cultural de la humanidad, así como la inclusión de esta bella ciudad en el circuito turístico de ciudades coloniales de América.

Jaime Morales Carazo, vice-presidente de la república y Presidente Honorario del Evento, hizo un reconocimiento a la encomiable labor de Gioconda Belli, poeta nicaragüense y ganadora del premio Biblioteca Breve otorgado por la Editora Seix Barrail de España. “Desde hace tiempo he sido amigo de los artistas nacionales, les he brindado mi apoyo porque respeto lo que hacen”, concluyó el vice-mandatario, quien también reconoció que “un país que no respete y ame a sus poetas, y los gobiernos que no respeten a sus intelectuales están condenados a caminar en la oscuridad”.

Con estas palabras quedó inaugurado de manera oficial este IV Festival Internacional de Poesía, con la promesa implícita y la vibrante emoción en el aire, de que no es la última vez que tendremos el placer de escuchar versos y voces del mundo juntarse en la Gran Sultana, Granada.

Tras la inauguración, el cantautor nicaragüense Luis Enrique Mejia Godoy hizo vibrar a la multitud que se congregó para disfrutar de la noche de apertura de este magno evento cultural. La voz y acordes de guitarra de Luis Enrique encendieron aún más la noche festiva de la ciudad colonial que sirve de escenario para el encuentro de los poetas del mundo.