Hace algunos días se supo de la grave enfermedad terminal de la ex-primera Dama de Nicaragua, Doña Lila T. Abaunza de Bolaños, esposa del ex–Presidente Enrique Bolaños Geyer, 2002-2006. Según fuentes familiares se espera un desenlace fatal en cualquier momento. Todo el país está a la expectativa y hay sorpresas acerca de lo que ha venido pasando a los ex presidentes de Nicaragua en los últimos años.
Basta recordar algunos acontecimientos alrededor del ex–presidente Dr. Arnoldo Alemán Lacayo. Se le presentaron luego de la entrega presidencial en el 2002 la muerte de su hermano Agustín. Le siguió el deceso de su hermana Amelia y el de su hijo Arnoldo Alemán Cardenal quien murió intoxicado en una piscina en su Hacienda El Crucero, a 20 kilómetros de Managua, la Capital de Nicaragua, en Centroamérica, cuando intentaba salvar a varios trabajadores que hacían labores de limpieza en el fondo de la piscina con una bomba de electricidad, que emanaba monóxido de carbono en grandes cantidades, que lo mató a él y a otras personas más. Además el líder del Partido Liberal Constitucionalista, PLC, enfrenta una condena de 20 años de prisión por varios ilícitos y tiene a toda Nicaragua por cárcel. No puede salir del país y hasta ahora con la aprobación del nuevo Código Penal se vislumbra la posibilidad cierta de su próxima libertad total por cumplimiento de la pena de la cual lleva 5 años. La Comisión de Justicia de la Asamblea Nacional aprobó un dictamen sobre la ley de plazo fijo para casos pendientes y que pretende beneficiar a todos aquellos reos que aún no tienen una sentencia firme. Si la aprueba el plenario, los Magistrados del Poder Judicial, están obligados a resolver los casos en 30 días por lo cual podría quedar en libertad el ex- presidente Arnoldo Alemán Lacayo. Tal vez para el ex-mandatario es el inicio para que vea el sol claro dentro de las circunstancias adversas y positivas que le ha tocado vivir en estos últimos años. Sigue siendo el alto jefe del segundo Partido de Nicaragua, el Partido Liberal Constitucionalista, PLC, y su poder de decisión es importante en los asuntos del país.
Al ex-presidente de Nicaragua, Enrique Bolaños Geyer, 2002-2006, también lo sigue la tragedia. Durante el período de su gobierno murieron dos de sus hijos: Jorge de un derrame cerebral fulminante y Javier de cáncer en la sangre. Ricardo murió años atrás por un accidente de tránsito brutal en la carretera a Masaya después de bachillerarse cuando un vehículo a alta velocidad se fue a estrellar de frente. Ahora se presenta una situación difícil para don Enrique con su señora esposa Doña Lila Teresita del niño Jesús Abaunza de Bolaños, conocida como Doña Lila T. Tres situaciones inmediatas con familiares muy cercanos. Estos hechos significativos denotan una rara situación alrededor de esos personajes políticos liberales. Ambos perseguidos por lo fortuito y casual. Será algún mensaje para ambos esas situaciones que están viviendo y vivieron? Esas explicaciones se las dejamos a los estudiosos de los hechos místicos o a los misterios de la vida misma.
En el caso del actual Presidente Daniel Ortega Saavedra su hermano Camilo murió en un enfrentamiento guerrillero contra la guardia del ex- dictador Somoza en Febrero de 1978 en la Cuidad de Masaya.
Hace algunos años su única hermana, Germania, murió de una enfermedad terminal. Su tía Doña Lastenia falleció recientemente y su madre la Señora Lidia Saavedra Vda. de Ortega murió también de varias enfermedades que no fueron del conocimiento público.
Hechos que en alguna medida también han perseguido la vida del presidente y que en alguna medida podrían estar ligados a casos y situaciones trágicas en la vida de los personajes mencionados que ocuparon la primera magistratura del país y la ejercen actualmente. Es importante señalar otro hecho alrededor del mandatario Ortega. Fue presidente de Nicaragua en dos ocasiones electo por el voto secreto, directo, en elecciones generales. Lo cual lo sitúa también en una posición interesante como personaje que llama la atención por su tenacidad y persistencia que lo hizo alcanzar la meta presidencial. Es el personaje de carisma dentro del Partido sandinista. FSLN, y, no se vislumbra a lo inmediato, ningún sucesor en su cargo de jefe máximo del partido de gobierno. Se habla de que su esposa, la poetisa Rosario Murillo Zambrana, sería la que manejaría los hilos conductores del Partido sandinista en una sucesión partidaria y gubernamental tal como sucedió en Argentina con Cristina Fernández de Kichner. Vemos entonces en este breve análisis esas circunstancias interesantes que rodean a los que ocupan y ocuparon la presidencia de Nicaragua. Todos ellos perseguidos por la tragedia, por La Chalupa de la vida, donde nadie sabe sobre el futuro, solamente se intenta comprender sobre el presente que existe porque el mañana es incierto. No existe. Nadie sabe. Sólo la energía divina.