Al igual que el gobernante de Venezuela, Hugo Chávez, el presidente de Ecuador, Rafael Correa, instó a las Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) FARC que deben "dejar las armas" para dar inicio a un diálogo para conseguir la paz en Colombia.
"Ya basta, dejen las armas, vamos al diálogo político diplomático para encontrar la paz", "he hecho el mismo llamado (que Chávez), ¿que futuro tiene la guerrilla que combate con un Gobierno democrático?", indicó el ecuatoriano ante la televisora Ecuavisa.
Correa, señaló que no denominará "terroristas" a las FARC, pues no lo hace ningún país latinoamericano y hacerlo sería involucrarse con un conflicto ajeno.
En cuanto a la libertad de rehenes por las FARC, Correa dijo que tiene "el derecho y el deber" de intervenir en asuntos humanitarios poniendo en duda que el conflicto de Colombia sea sólo interno, pues aseguró que se ha "desbordado" y afecta al resto de países de la región.
Además mencionó que ha "ordenado" a Gustavo Larrea, Ministro de Seguridad Interna y externa de Ecuador, para realizar las gestiones precisas para conseguir la liberación de los secuestrados por las FARC.
Con relación a este tema, Correa señaló que "nosotros no tenemos ningún afán de reanudar las relaciones diplomáticas, somos los agredidos”, e indico que Colombia debe "indemnizar a las víctimas y al país" por la incursión de militares colombianos contra un campamento de las FARC instalado en Ecuador, donde murieron al menos 26 personas, incluyendo al "número dos" de esa guerrilla "Raúl Reyes".
En su presentación, el jefe de estado ecuatoriano, realizó ciertos ataques a los medios de comunicación ecuatorianos y mencionó que "la mayoría de la prensa es mediocre y corrupta".