El mandatario nicaragüense, José Daniel Ortega Saavedra, afirmó el pasado fin de semana que Centroamérica no “comparte” la idea del Presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, de producir masivamente biocombustible.
En vez de la producción de biocombustible se debería de pensar mejor en la producción de alimentos ya que esto amenaza la existencia de la reserva natural del Amazonas, afecta al medio ambiente y perjudica la nutrición de los seres humanos, dijo el presidente de Nicaragua.
“No compartimos en lo absoluto el proyecto que tiene (Lula da Silva). En Brasil está de moda el biocombustible, pero está siendo amenazada la reserva del Amazonas. Deberíamos de producir alimentos, (que) es lo que más hace falta”, dijo Ortega.
Ante el marco de una cumbre entre México, Colombia y Centroamérica, un mecanismo para volver a poner a flote el Plan Puebla-Panamá, sentó su posición contra las medidas que ha tomado Lula da Silva quien ha sido el principal promotor y productor de biocombustibles para el mundo.
Ortega detalló que ni el istmo centroamericano en conjunto, tiene las mismas capacidades de Brasil ni de Colombia para la producción de biocombustibles. “Nosotros estamos preocupados en la producción de caña y de frijoles”, señaló Ortega, quien aseguró que “en Nicaragua es pecado mortal hablar del biocombustible”.
En Nicaragua el empresario nacional Carlos Pellas, ha iniciado la producción y exportación de etanol hacia Holanda. La semana pasada hizo el envío de tres millones de litros hacia ese destino.
Estados Unidos y Brasil son los principales productores de etanol, el primero a partir del maíz y el segundo de la caña de azúcar.