El Presidente de Nicaragua, Daniel Ortega Saavedra, dijo ayer en una reunión del gabinete económico, que el Hotel Barceló, Montelimar, deberá de pagar los 5 millones de dólares que debe al Estado pues de lo contrario tendrá que regresar la propiedad al gobierno nicaragüense. De esa forma se pronunció oficialmente ante el diferendo y embargo preventivo que mantiene la Procuraduría General de la República con la empresa turística española.
El mandatario nicaragüense dijo que los anteriores gobiernos que llegaron al poder en la década de los 90 nunca se atrevieron a cobrarle al Hotel Barceló, Montelimar, lo adeudado, y negó que la postura gubernamental vaya a significar un peligro de la inversión turística.
Recientemente en la comisión de turismo de la Asamblea Nacional llegó el representante jurídico del complejo turístico Barceló, Dr. Tomás Delaney, junto al Gerente General de esa empresa, Walter Martino, a exponer su punto de vista acerca del diferendo que se tiene con el gobierno de Nicaragua, que reclama una deuda pendiente que no ha sido pagada por la empresa turística Barceló.
Por otro lado, anunció anoche que el Estado llegó a un acuerdo con la empresa española de energía Unión Fenosa, donde se acordó que el 16 por ciento de las acciones serán del gobierno de Nicaragua y podrán adquirirse más porcentaje accionario. También se tendrá un representante en la junta directiva de la empresa española, dijo el Presidente nicaragüense.
Por otro lado, el Presidente Daniel Ortega Saavedra, dijo que el acuerdo con Unión Fenosa se logró con la gestión del Presidente Español José Luis Rodríguez Zapatero. Criticó a los partidos políticos que denominó vende patrias que se oponían a la realización de las negociaciones con la empresa Fenosa ya que manifestaban que ponían en riesgo la inversión extranjera lo cual demostró que no es así.
Recordó que cuando el gobierno sandinista entregó el poder en la década de los 90 se hizo con la entrega de las generadoras eléctricas propiedad estatal. Fue el gobierno neo liberal el que privatizó la energía y su comercialización a favor de los intereses extranjeros, dijo el mandatario Daniel Ortega Saavedra.
Expresó que el gobierno de Nicaragua por primera vez presentó ante el Fondo Monetario Internacional, FMI, un programa salido del propio país.