El gobierno del presidente George W. Bush se alista en anunciar hoy lunes un plan de reforma detallada en los mecanismos de regulación financiera en Estados Unidos, con cambios que representan la mayor reestructuración del sector nunca visto desde la Gran Depresión de la década de 1930.
De acuerdo con un resumen ejecutivo de 22 páginas que una agencia internacional de noticias tiene desde el pasado viernes, la administración Bush intenta hacer frente a la crisis crediticia que a afectado a la economía de Estados Unidos en la cual subraya modificaciones esenciales a los mecanismos de supervisión en el sistema financiero.
La propuesta le otorgaría nuevas y mayores facultades a la Reserva Federal, de manera que el Banco Central sirva como el principal protector de estabilidad en el sistema.
El Secretario del Tesoro de Estados Unidos, Henry Paulson, dará a conocer el principal planteamiento en un discurso hoy lunes.
La propuesta busca darle sentido al confuso sistema de vigilancia, donde varias oficinas gubernamentales reglamentan bancos, instituciones de ahorro y uniones de crédito.
Bajo el sistema actual de vigilancia, las instituciones que reciben depósitos y reciben protección federal deben tratar con varios organismos reguladores. En contraste, los fondos de cobertura, las firmas de inversión con capital de riesgo y los bancos de inversión tienen una reglamentación federal sustancialmente menor.
La crisis crediticia que ha estremecido a Wall Street y restringido los créditos permitió el afloramiento de esa diferencia en la regulación.
Numerosas instituciones financieras han reportado miles de millones de dólares en pérdidas que provienen de crecientes moratorias hipotecarias causadas por los prolongados problemas del sector de la vivienda.
En un movimiento inusitado con el propósito de que el crédito fluya de nuevo, la Reserva Federal permitió recientemente que los bancos de inversión reciban préstamos directos del Banco Central, facultad que antes sólo tenían los bancos mercantiles.
La decisión fue adoptada como parte de un programa para rescatar a Bear Stearns Cos., el quinto banco de inversión más grande en Estados Unidos. La firma casi colapsa a principios de mes, y la Reserva Federal le extendió de inmediato una línea de crédito por 30 mil millones de dólares para facilitar la venta de Bear Stearns al también banco de inversiones JP Morgan Chase & Co.
Las medidas de la Fed han colocado a los fondos públicos estadounidenses en un riesgo potencial y aumentado los reclamos de una mayor regulación en los bancos de inversión y otras instituciones.
David Nason, subsecretario del Tesoro para finanzas internas, dijo que la meta principal del gobierno federal es avanzar en la solución de la crisis crediticia actual, en el entendido de las autoridades de que el debate sobre un plan de reforma de largo alcance podría durar varios años.
"Estos son problemas muy complejos que requieren mucho debate", dijo Nason en una entrevista con el sábado. "Va a tomar tiempo resolverla", enfatizó.
Es probable que la propuesta genere un fuerte debate en distintos sectores de los servicios financieros y en el Congreso, donde algunos demócratas se quejarían de que la medida no es suficiente para combatir los abusos de instituciones financieras.
Algunos demócratas clave, como el representante Barney Frank que preside la Comisión de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes, propone ideas que buscan hacer más eficiente la vigilancia, pero que también impondrían controles nuevos, más allá de los incluidos en el plan de Paulson.
El senador Charles Schumer, una voz importante en el debate, dijo que no cree que Paulson haya ido lo suficientemente lejos para resolver algunos de los nuevos tipos de inversiones complejas, que quedaron en evidencia con la actual crisis financiera.
Grupos empresariales en general expresaron el sábado su apoyo al enfoque de Paulson, pero dijeron que habría un debate significativo sobre los detalles.
"La crisis actual muestra justamente, de una manera muy severa, que ... se necesita una estructura reguladora que sea simple, ágil y moderna, y la nuestra no pasa esa prueba", dijo David Hirschmann, presidente del Centro para la Competitividad de los Mercados de Capital, de la Cámara de Comercio Estadounidense.
El plan de Paulson contempla en principio:
_ Designar al Banco Central estadounidense como el regulador principal de la estabilidad en de los mercados, mediante la ampliación sustancial de su capacidad de examinar no sólo a los bancos comerciales sino a todos los segmentos en el campo de los servicios financieros, si considera que hay una amenaza potencial para el funcionamiento apropiado del sistema financiero en general.
_ Mudar las funciones de la Oficina de Vigilancia a las Instituciones de Ahorro, a la Oficina del Interventor del Dinero Circulante, aunque al final el plan prevé sólo un regulador bancario.
_ Fusionar la Comisión de Valores con la Comisión de Intercambio de Futuros de Materias Primas.
_ Crear una entidad reguladora nacional para las compañías de seguros, ya que actualmente son reglamentadas en su mayor parte por los estados.
_ Establecer una comisión que resuelva los abusos expuestos por la actual ola de moratorias hipotecarias. |