Distintos puntos de la capital de Nicaragua, Managua, fueron interrumpidos por los empresarios del transporte selectivo e interurbano tras la exigencia de este gremio al gobierno a que el precio de combustible se congele a 40 córdobas con 50 centavos el galón de las gasolinas súper, regular y diesel.
Al ver los taxistas que algunas rutas interurbanas laboraban normalmente, al igual que algunos taxistas y buses del transporte urbano colectivo también, los abucheaban y los detenían exigiéndoles que se unieran a las protestas.
En cada punto se observaban agentes de la Policía Nacional “viendo los toros de largo”. Entre colegas taxistas se quitaban la torre que ofrece el servicio de TAXI y se las retenían después de marcar el número de placa para que los afectados llegaran a reclamarlo después.
Según algunas cooperativas unas mil unidades estuvieron en paro sólo en Managua, y en Masaya, Ticuantepe y Granada fueron 500.
Entre los puntos de Managua que se reportaron mayores incidentes de este tipo fue en Linda Vista, Rubenía, el Km 14 de la Carretera a Masaya, en Gancho de Camino, la rotonda Rubén Darío o Metrocentro, el mercado Oriental, el Zúmen, etc.
En los departamentos las protestas fueron acompañadas con empresarios del transporte de carga pesada en los que destacan Masaya, León (aquí fue con tranques), Granada, Ticuantepe, el Coyotepe, etc.
Los usuarios de los distintos tipos de transporte exigieron al gobierno que escuchen las peticiones de los transportistas para evitar un caos mayor.