José García Belaunde, canciller de Perú, restó importancia a las declaraciones que dio el Presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, sobre la Cumbre de presidentes de América Latina y Europa, al igual expresó que el nicaragüense no tiene derecho a hablar sobre el evento por su ausencia en la reunión.
García señaló que "el mandatario nicaragüense no tiene derecho a hablar si no ha venido, habla de lo que le han dicho", indicándole que tales declaraciones no son “serias”.
Ortega manifestó que la cumbre en Lima fue un encuentro "censurado y antidemocrático", por su organización policíaca al evitar que los jefes de Estado latinoamericanos pudieran expresar sus puntos de vista.
En cuanto a lo anterior, García añadió que Ortega "juega a dos cachetes (a dos caras), tiene su Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos, que no ha denunciado ni piensa denunciarlo, y juega también al ALBA, que es una alternativa frente al TLC".
Además el peruano instó al nicaragüense a "que se ponga de acuerdo consigo mismo", porque aparte del ALBA (Alternativa Bolivariana para las Américas )y el TLC (Tratado de Libre comercio) Nicaragua tiene la Cuenta del Milenio, que es una concesión “de EE.UU. hacia ciertos países para que puedan luchar contra la pobreza y fortificar sus instituciones, y lo tiene gratuitamente", indicó.
García aclaró que en la cumbre ALC-UE los jefes de estados hablaron con toda libertad y que en las conclusiones no se puede reflejar exactamente la posición de todos los países ya que "se buscan los consensos".