El Consejo Supremo Electoral (CSE) decidió hacer un recuento de votos a petición de diversos grupos religiosos, empresarios privados, políticos, países cooperantes y de ONG’s pero solamente será para las actas de las Juntas Receptoras de Votos (JRV), que implican 2 mil 100 actas de la capital Managua.
Después de tres días de exigencias por parte de grupos opositores, el Magistrado presidente del CSE, Roberto Rivas Reyes, informó durante una conferencia de prensa, que el recuento se dará a petición de las distintas agrupaciones pero aseguró que esto probablemente presentará el mismo resultado, manifestó el funcionario.
El pasado lunes 10 de noviembre el CSE leyó resultados preliminares donde el partido de gobierno Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) logró ganar Managua con el 51.30 por ciento, mientras la Alianza PLC obtuvo el 46,45 por ciento.
Ante el informe hecho por el CSE muchos lectores del diario La Jornada han enviado comentarios que cuestionan al CSE de hacer recuentos de votos en la capital Managua.
Al parecer la tendencia de lectores y radioescuchas fue la misma puesto que en las distintas emisoras radiales del país, al igual que en los sitios web de dos periódicos nacionales, los comentarios de sus lectores reprochaban que el CSE sólo tome estas medidas en Managua, a pesar que hay denuncias de supuestas irregularidades en varios departamentos y municipios del país, entre los que están León, Carazo, Rivas, etc.
Sobre las boletas electorales que han aparecido en los basureros municipales de León y Carazo y en los cafetales del municipio de Dolores, el magistrado Rivas se pronunció diciendo que harán una extensa investigación para determinar cómo se ha fugado este material electoral “extraño” de los almacenes del Consejo Supremo Electoral.
El presidente del CSE manifestó que para hacer el recuento se necesitarán a los fiscales de todos los partidos políticos para que verifiquen la exactitud de los votos depositados por los electores. Rivas no mencionó que participen observadores nacionales e internacionales más que los fiscales de los partidos.
