*Ha sido dura esta semana postelectoral para los comunicadores nacionales
*Queman la camioneta de Radio Ya emisora del FSLN
El periodismo ha resultado afectado en estas elecciones antes y después de la realización de las mismas. En menos de una semana, el gremio periodístico ha recibido fuertes golpes que han dejado ya varios incidentes, pero, hasta el momento no se ha visto ningún muerto que haya afectado la libertad de prensa.
La madrugada de ayer miércoles el periodista de la Nueva Radio Ya, Nicolás Berrios, denunció que casi muere “asesinado” a manos de supuestos asesinos opositores al partido de gobierno del Frente Sandinista. El comunicador realizaba sus labores de recabar informaciones.
La camioneta marca Toyota Hilux donde se transportaba Berrios fue incendiada y relató que fue interceptado por dos vehículos, uno que se le puso en frente y otro al lado.
Con lágrimas en los ojos desde el Hospital militar Berrios relató que los tipos lo bajaron del vehículo para golpearlo y amenazarlo de muerte con un arma corto punzante y cuando los malhechores hacían esto, le advertían que harían lo mismo “con todos los de tu mismo bando”, en alusión a los periodistas de medios oficialistas, dijo el perjudicado.
Durante la agresión física “casi me cortan la lengua” y no sabe por qué no lo hicieron pues tenían la oportunidad de “hasta matarme si ellos querían”, relató Berrios en un cuarto de cuidados del hospital Militar.
El pasado martes otro periodista de la radio Ya , Octavio Sevilla, recibió patadas por parte del vocero nacional del Movimiento Vamos con Eduardo, Eliseo Núñez Morales hijo. Al parecer les ha tocado duro a los periodistas de oposición que laboran para la emisora Radio Ya abordar las informaciones políticas por lo polarizado de las mismas.
La administración del hospital Militar informó que Berrios se encuentra fuera de peligro y no tiene ninguna herida interna que ponga en riesgo su vida.
Desde ayer se encuentra un fuerte dispositivo de seguridad resguardando la entrada a la emisora radial que ha recibido amenazas de ser incinerada de personas desconocidas. La administración de la emisora ha denunciado que Montealegre es quien ha incitado a ejercer estos actos vandálicos.
La directiva periodística del diario La Jornada hace un llamado a la reflexión a todos los grupos políticos para evitar que otros colegas periodistas sean lastimados o en un peor de los casos asesinados.