WASHINGTON.- La aprobación del salvataje financiero por parte del Congreso de Estados Unidos es esperado para el fin de semana con algunas modificaciones, a fin de satisfacer las posiciones más contrarias entre republicanos y demócratas.
Dada la inexistencia de un Plan B al desembolso de 700 mil millones de dólares de las arcas del estado para salvar Wall Street, la Reserva Federal -el banco central del país aunque privado- y el departamento del Tesoro parecen prepararse para lo peor.
Sin embargo, las presiones políticas al más alto nivel y, sobre todo, las pérdidas en Wall Street virtualmente mayores que el monto del salvataje estatal, la aprobación del Congreso puede concretarse durante el fin de semana próximo, de acuerdo estimaciones de analistas.
La Casa Blanca y el departamento del Tesoro, por un lado, y dirigentes de ambos partidos en el Congreso, por otro, se multiplican por estas horas para debatir modificaciones, luego del rechazo del martes.
Para lograr una mayoría entre ambos partidos, pues nadie quiere asumir solo la responsabilidad en plena campaña electoral, deberán lograrse concesiones a las alas más radicales que, por distintos motivos, no aprueban el plan.