LA PAZ.- La oposición dejó en suspenso su diálogo con el gobierno y le pidió al presidente que ratifique si le dará garantías para seguir negociando, tras denunciar la detención de un dirigente cívico en el sureste de Bolivia.
Los prefectos opositores dejaron este mediodía "en manos del presidente Evo Morales" la suerte del diálogo sobre lo cambios constitucionales y denunciaron que el "entorno radical" de su gobierno busca el fracaso de la búsqueda de consenso sobre los cambios constitucionales.
El prefecto de Tarija, Mario Cossio, pidió al presidente que se pronuncie de manera expresa "si se van a restituir las garantías constitucionales, si se van a respetar los derechos de los ciudadanos", como condición "imprescindible" para avanzar en el dialogo.
"En tanto esto no ocurra, los cinco departamentos que participamos en el diálogo suspendemos temporalmente nuestra participación en las mesas de trabajo del diálogo", anunció Cossio.
Aclaró sin embargo, "no estamos rompiendo el diálogo" y para demostrar "que no se rompe", anunció que junto a sus colegas de Chuquisaca, Beni y Santa Cruz permanecerán en Cochabamba "a la espera de la respuesta del señor presidente".