Hace referencia al Cafta
El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega Saavedra, estuvo como invitado ayer ante los miembros del Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep) que celebraban el Dia del Empresario y dijo que “la etapa de la Revolución” cuando se dieron las expropiaciones y confiscaciones ya pasó. El discurso del Presidente nicaragüense fue sin extremos de ataques a la política económica de los empresarios privados. Se refirió en el discurso al capitalismo salvaje y el comercio justo.
El presidente nicaragüense con un libro del premio Nobel de Economía Joseph Stiglitz en mano, trató de persuadir a los empresarios de las bondades del “comercio justo que yo ando repitiendo”, pero reiteró su confianza más en el socialismo, por considerarlo más avanzado.
Dijo: “El Cafta nos ha abierto espacio, pero no es lo mejor” haciendo referencia al Tratado de libre comercio entre Centroamérica, República Dominicana y los Estados Unidos. Sobre la legalidad dijo que “una de las polémicas es el Poder Judicial, pero el Poder Judicial será fortalecido a través de leyes, no de individuos”, señaló al abordar uno de los señalamientos de José Adán Aguerri, presidente del organismo de los empresarios privados.
El directivo de la junta de Consejeros del sector privado, José Antonio Baltodano, dijo que Gobierno puede contribuir “enormemente a mejorar la situación y sin gastar un centavo, sólo dando confianza”. Hizo un llamado a la votación a la población para las próximas elecciones municipales del mes de Noviembre.
“Hay que votar por buenos alcaldes, buenas alcaldesas. Hay que salir a votar”, señaló Baltodano y luego informó que los empresarios agrupados en el Cosep aplicarán un proyecto para promover el voto.
El Presidente Ortega Saavedra dijo en su intervención “queremos seguir trabajando de la mano de los hermanos del Cosep”. No se refirió en ningún momento de su discurso a las palabras de Niels Ketelhön, Rector del Instituto Centroamericano de Administración de Empresas de Nicaragua, Incae, quien dijo que se precisa tener relaciones “más que cordiales” con los países con los que Nicaragua mantiene relaciones comerciales.
No estuvo la hija del empresario de oposición Lucía Salazar, hija de Jorge Salazar, en cuya memoria los dirigentes del Cosep entregaron placas a los empresarios más destacados. El mandatario Ortega Saavedra no almorzó con los empresarios privados. Su llegada al evento se caracterizó por ser de las más puntuales. Un elemento que señalan los hombre y mujeres de prensa que se quejan que cuando son invitados a la cobertura de los actos oficiales tienen que esperar muchas horas a que aparezca el presidente nicaragüense.
