Muchos usuarios exigieron a los empresarios del transporte ampliar las flotas en las temporadas especiales.(FOTO JAIRO CAJINA)
Durante horas los miles de veraneantes tuvieron que esperar su turno para abordar las distintas unidades de buses
Los buses del transporte colectivo público de los balnearios de Poneloya, Pocohomil y La Boquita colapsaron ayer domingo cuando los miles de veraneantes y turistas nacionales y extranjeros se disponían a regresar a sus hogares u hoteles.
De acuerdo a los últimos informes del Instituto Nicaragüenses de Turismo (Intur) en estas vacaciones de Semana Santa se reportó un aumento de 7.7 por ciento en el turismo de los distintos balnearios, lo que pudo haber causado el colapso del sistema de transporte colectivo público.
En el balneario de Pochomil el equipo del diario La Jornada en el sitio de internet www.lajornadanet.com constató que los sistemas de buses eran un caos porque había filas de pasajeros esperando abordar los buses a grandes distancias de hasta tres cuadras o metros, bajo el inclemente sol que caracteriza la Semana Mayor.
Al consultárseles a los usuarios del transporte colectivo manifestaban que llevaban hasta dos horas y no habían podido abordar ninguna ruta de bus que los llevara de regreso a sus hogares, porque hoy lunes debían ingresar a sus puestos laborales.
También notamos que en Poneloya, balneario turístico ubicado a 100 kilómetros de Managua ,la Capital de Nicaragua en el occidente del país, otro equipo periodístico, nos informaba que los buses iban “topados” y por el colapso ocasionado al transporte público por los miles de veraneantes, los agentes de tránsito no daban abasto para poner el orden .
Los últimos informes de la Policía Nacional han reportado más de 18 accidentes de tránsito durante las celebraciones de la Semana Santa. Muchos bañistas pidieron a los empresarios del transporte público de los balnearios reforzar las flotas para estas ocasiones especiales.