Fernando Lugo, cuando admitió que tuvo un hijo cuando todavía era obispo. (FOTO Ansa)
"Pedimos perdón por los pecados de los miembros de la iglesia, tanto pastores como fieles", expresó el comunicado
ASUNCION.- La Conferencia Episcopal Paraguaya (CEP) pidió "perdón por los pecados de los miembros de la Iglesia", en un comunicado que hace directa alusión, aunque sin mencionarlo, al presidente Fernando Lugo, quien admitió que tuvo un hijo cuando todavía era obispo.
Lugo, de 58 años, reconoció el lunes su relación con Viviana Carrillo, de 26, madre de su hijo, que nació el 4 de mayo del 2007. La gestación se produjo cuando el mandatario era obispo emérito de San Pedro, 350 kilómetros al norte de Asunción.
El comunicado de la jerarquía católica no mencionó a Lugo, aunque sí aludió a "los últimos acontecimientos", es decir al escándalo que suscitó desde la semana pasada la demanda por filiación.
"Pedimos perdón por los pecados de los miembros de la iglesia, tanto pastores como fieles", expresó el comunicado.
Pidió asimismo a obispos y sacerdotes renovar el compromiso asumido por el clero en la reciente Misa Crismal de Semana Santa, ocasión en que los mismos reafirmaron sus promesas asumidas con la ordenación, incluyendo el celibato.
"Recurrimos a todos los fieles católicos y a las personas de buena voluntad a orar por nosotros para mantenernos fieles a nuestra misión sacerdotal y episcopal", expresó la nota.
Ante una pregunta de los periodistas, el vicepresidente de la entidad, monseñor Claudio Jiménez, admitió luego que lo ocurrido con el presidente Lugo afecta a la iglesia católica.
"Hay personas que tienen una impresión de los obispos, y tenemos que hacer méritos para recuperar esa consideración", expresó.
Consultado si Lugo puede recibir la comunión tras lo ocurrido, Jiménez afirmó que el único pecado que no puede ser perdonado, como dice la Biblia, es el cometido contra el Espíritu Santo, "y después todo se perdona".
En tanto, un representante legal del presidente acudió a una oficina judicial para oficializar el reconocimiento del niño e inició los trámites para darle el apellido Lugo.