Sobre la prohibición en la importación de armas, se cree muy poco probable que el Capitolio autorice cambios legales en este tema. (FOTO ANSA)
Fuentes gubernamentales mexicanas pidieron "bajar las expectativas", porque "se trata de una primera reunión formal" como presidentes entre Obama y Calderón
MEXICO.- La visita que iniciará hoy el presidente estadounidense, Barack Obama, a México, genera escasas expectativas en el gobierno de Felipe Calderón y en sectores académicos, mientras las fuerzas políticas exigen que se presione por una reforma migratoria en el país vecino.
En su primer viaje a América Latina, y camino a la cumbre de las Américas de Trinidad y Tobago del fin de semana, Obama pretende enviar "una clara señal" a México de que comparte sus "desafíos" en diversos ámbitos, sobre todo el de la seguridad y el comercio, según reveló la víspera la Casa Blanca.
Pero fuentes gubernamentales mexicanas pidieron "bajar las expectativas", porque "se trata de una primera reunión formal" como presidentes entre Obama y Calderón. Además, destacaron que los aspectos centrales de las relaciones "implican cambios que requieren la participación del Congreso estadounidense".
Los círculos oficiales consideraron que se estima poco probable "un compromiso" específico de Obama en torno de una reforma migratoria, por la crisis económica en Estados Unidos.
Sobre la prohibición en la importación de armas, se cree muy poco probable que el Capitolio autorice cambios legales en este tema.
En el mejor de los casos, según las fuentes, se esperan avances en seguridad fronteriza, mediante el combate a la delincuencia.