A pesar de las alertas mundiales por la porcina, los nicaragüenses no usan mascarillas. En el aeropuerto internacional de Managua, no se observan personas con mascarillas. (FOTO JUAN ARÉVALO)
Las autoridades de salud hicieron un llamado a la población para que mantenga la calma
El secretario general del Ministerio de Salud, Minsa, Enrique Beteta, anunció que se hacen pedidos de más de 100 mil mascarillas para los hospitales locales ante las posibilidades de que el brote de la fiebre porcina se extienda en el país procedente de México.
Señaló que se toman las precauciones ya que al considerarse en nivel 5 la gripe porcina se debe de estar en alerta permanente. Reconoció que el Ministerio de Salud mantiene en inventarios mascarillas pero la medida es parte de la emergencia sanitaria, dijo.
Ayer se realizó un encuentro extraordinario de los ministros de Salud de Centroamérica y República Dominicana para abordar de manera conjunta el peligro de la peste porcina.
El alto funcionario de Salud dijo que no hay casos sospechosos ni confirmados de influenza porcina en Nicaragua. “Hasta este momento no hay reportes en el país”, afirmó. Beteta dijo que el Ministerio de Salud tiene en sus centros de salud ventiladores y antivirales para enfrentar cualquier eventualidad.
Las autoridades de salud hicieron un llamado a la población para que mantenga la calma. Hay inquietud entre los nicaragüenses que están comprando masivamente grandes cantidades de mascarillas para protegerse de la gripe porcina.
El producto se ha terminado en diversas farmacias según dio a conocer el señor Alberto Lacayo Presidente de la Asociación de Farmacias Unidas de Nicaragua, AFUN. Muchos negocios, como en mi caso, estamos buscando mascarillas porque está volando”, dijo. Personas de todas las edades buscan las mascarillas que tiene un costo de 10 centavos dólar cada una. En las calles la gente no sale con las mascarillas puestas, ni en los buses , ni en lugares públicos pero sí es visto que esta siendo usado por los trabajadores hospitalarios al atender a la población que busca los servicios de salud estatal.