Si el anuncio hecho por la Iglesia Católica es real, Nicaragua estaría en peligro que se inicie una guerra civil, como la ocurrida en los años ochenta. En la foto Sixto Ulloa. (FOTO ARCHIVO)
Ante el anuncio hecho por la Conferencia Episcopal acerca del supuesto surgimiento de grupos armados opuestos al supuesto fraude electoral municipal
El reverendo evangélico Sixto Ulloa, funcionario de la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH) a fin al gobierno, acusó a la Conferencia Episcopal de Nicaragua de estar en contra de la administración de Daniel Ortega Saavedra al no solicitar un diálogo entre posibles grupos armados que se están organizando al norte del país
Ulloa dijo que le parece que la posición de la Conferencia Episcopal “se ha vuelto política”, aseguró el representante evangélico, en una crítica abierta al anuncio hecho por el Arzobispo de Managua, Monseñor Leopoldo Brenes, sobre algunos grupos que se están armando en la zona norte.
“Lamentable y tristemente siento que a nuestro amigo nicaragüense cristiano en vez de sentarnos para ver ese problema, como que lo están manipulando a Monseñor Leopoldo Brenes y él como jefe de la Conferencia Episcopal, debería de sentarse con las autoridades y decirle ‘miren hay esto, evitémoslo’”, dijo Ulloa. Agregó que Brenes debería de “promover la paz y la reconciliación”.
Por su parte el reverendo Jairo Arce de Jinotega descartó que en este departamento se estén formando grupos armados para protestar en contra del supuesto fraude electoral denunciado por grupos políticos, sociales, empresariales y religiosos.
“En un trayecto por Mulukukú, Río Blanco y las Minas hasta llegar a Waspán, no hemos visto ni hemos oído de grupos armados que anden por esas zonas. Me parece que las declaraciones de los obispos están dadas en un contexto que deberían ser para otras cosas, para clamar la paz”, manifestó el evangélico.
Arce denunció que la Iglesia Católica no debería de abordar temas políticos porque “más bien tienen que tratar temas de reconciliación, de la teología, de la paz. Una noticia de esa calidad, de esa altura no es buena nueva del evangelio, es una mala noticia que no va a ayudar. Me da mucha tristeza que a estas alturas se este hablando de violencia entre los campesinos”, concluyó el cristiano evangélico.