Henry Martínez, es un caso de los cientos de jóvenes que buscan trabajo. (FOTO EDUARDO PÉREZ)
Informa OIT
Ayer, se celebró el día internacional de la juventud, sin embargo el desempleo en los jóvenes de América Latina y el Caribe es del 16 por ciento y en los adultos un 5 por ciento lo que indica que la tasa de desempleo en los jóvenes es tres veces mayor que en los adultos, informa la Organización Internacional del Trabajo, (OIT).
“No me dieron el trabajo porque no tengo experiencia. Buscan a personas que tengan cinco años de experiencia para el puesto”, dijo Henry Martínez, luego de salir de una entrevista de trabajo.
Martínez, quien es un joven con apariencia sencilla y de 24 años de edad, salió de la universidad hace dos años de la carrera de administración de empresas y aún no a encontrado trabajo por su falta de experiencia.
“Desde niño siempre quise crecer rápido para ayudar a mi familia, pero ya lo estoy, y no puedo ni dar un peso a la casa”, fueron las palabras entre cortadas por la tristeza de Martínez, que tiene años de buscar una oportunidad donde nadie se la da.
La frustración de la juventud, se ve reflejada en las encuestas que indican que en la región los jóvenes representan el 46 por ciento del total de desempleados.
“Gracias a Dios mi mamá, todavía está viva para ayudarme, pero ya no quiero seguir siendo carga de ella ni de nadie, el salario de ella no alcanza para nada”, entona melancólico Martínez.
A nivel regional se contabilizan 10 millones de jóvenes desempleados, 22 millones de jóvenes que no estudian ni trabajan y más de 30 millones que trabajan en la informalidad y en condiciones precarias.
“Tendré que trabajar de lo que me salga (…) total más adelante tal vez encuentre un trabajo relacionado con mi profesión”, dice molesto Martínez quien quiere iniciar su vida independiente.
Las condiciones en la que trabajan hoy los jóvenes en día de América Latina y el Caribe son muy diversas pues muchas veces desempeñan trabajos familiares no remunerados o trabajos precarios que no aportan significativamente a su desarrollo.
Por otro lado, como una respuesta al desempleo los jóvenes intentan emprender negocios propios, pero sin un estudio de las necesidades y oportunidades del mercado local, por lo cual, dichos negocios terminan fracasando al poco tiempo.
En América Latina viven más de 100 millones de jóvenes, per sólo 17 millones cuentan con trabajo formal.
Sin embargo, con el fin de mejorar la situación laboral de los jóvenes en América Latina la OIT cuenta, con el proyecto de Promoción del Empleo Juvenil en América Latina (PREJAL), el cual se ejecuta hace cuatro años en 8 países de América Latina y beneficia a más de 100 millones de jóvenes en la región.