Barack Obama, presidente de EE.UU. (FOTO ansa)
Según las nuevas directivas, los más altos ejecutivos de las firmas que reciben dinero del salvataje verán topes de 500.000 dólares para sus compensaciones
WASHINGTON.- El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, dio un fuerte paso contra lo que llamó la "avaricia" de los ejecutivos de Wall Street, al imponer un tope de 500.000 dólares a las compensaciones de los altos dirigentes de empresas que se benefician del dinero fiscal del salvataje.
"Esto es Estados Unidos, nosotros no estamos contra la riqueza, no estamos resentidos contra quienes alcanzan el éxito, y creemos que el éxito tiene que ser recompensado", dijo Obama en una declaración que pronunció junto a su ministro del Tesoro, Timothy Geithner. "Pero lo que pone a la gente de mal humor -continuó-, y justamente, es que los ejecutivos sean recompensados por fracasos, especialmente cuando esas recompensas son subsidiadas por los contribuyentes".
"Que altos ejecutivos se recompensen a sí mismos con este tipo de paquetes en el medio de esta crisis económica no solamente es de mal gusto -apuntó Obama- sino también una mala estrategia, y no lo puedo tolerar", agregó.
Según las nuevas directivas, los más altos ejecutivos de las firmas que reciben dinero del salvataje verán topes de 500.000 dólares para sus compensaciones, "una fracción de los salarios que recibían hasta ahora", dijo Obama. "Y si esos ejecutivos reciben compensaciones adicionales -precisó-, será en la forma de acciones que no podrán ser cambiadas hasta que a los contribuyentes se les devuelva su asistencia".