Felicidades al nicaragüense Román “el chocolatito” González por el triunfo obtenido el día de hoy por Nicaragua y Centroamérica. (FOTO REPRODUCCIÓN)
Japonés resistió pero fueron contundentes los golpes del nicaragüense
A las 6:10 de la mañana hora de Nicaragua, todos los nicaragüenses fueron espectadores a través de los canales de la televisión, del triunfo de Román “Chocolatito” González sobre el japonés Katsunari Takayama a quien lesionó el parpado izquierdo que lo hizo brota sangre.
El “Chocolatito” dedicó la pelea a su mentor y también paradigma, el ex tri-campeón mundial de boxeo, Alexis Arguello recientemente fallecido. El cronista deportivo, Edgard Tijerino Mantilla, calificó en un titular de un diario matutino horas antes de la pelea a Román González “el chocolatito” como el “pequeño Alexis”.
Es cierto era el “Pequeño Alexis” por la ofensiva y los jab que lanzaba a su contrincante el japonés y ex–campeón Takayama de una manera contundente. No se equivocó Edgard Tijerino Mantilla al señalar que “ese jab zurdo, relampagueante, preciso y dañino es un disparo sometido a educación, como sus movimientos laterales, esa facilidad para realizar contraofensivas y las combinaciones de golpes ¿Qué es lo extraño, si Román “Chocolatito” González es un producto de la escuela de Alexis Argüello, si el propio flaco estuvo trabajando como un escultor en moldearlo, domando su mármol?.”
Es lo que vimos durante los 12 round que duró la pelea en la cual hay que reconocer la resistencia que puso el japonés a los contundentes golpes propinados por Román en la pelea de hoy por la mañana.
La afición boxística se sintió correspondida por la respuesta del “Chocolatito”. Un desayuno agradable de velada que hizo salir a los capitalinos de su rutina matutina de todos los días que indudablemente los hará sentirse mejor en el transcurso de todo el día laboral.
Felicidades al nicaragüense Román “el chocolatito” González por el triunfo obtenido el día de hoy por Nicaragua y Centroamérica. Estuviste a la altura y eso nos alegra porque significa que aprendiste las lecciones de tu entrenador del recordado Alexis Arguello. Acuérdate de sus enseñanzas y de todos sus consejos porque un padre es aquel que “te enseña para toda la vida”, dice un refrán popular. El peso pequeño de las 105 libras tiene entonces un futuro prometedor y ojalá lo aproveche por su bien y nuestro país. Si la Patria es pequeña una grande la sueña, decía el Panida Rubén Darío. Bien por Nicaragua “Chocolatito”.