Micheletti decidió mantener el toque de queda

TEGUCIGALPA.- El régimen de facto hondureño denunció ante el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas las amenazas del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, de enviar "fuerzas militares" al país.

El canciller de facto, Carlos López Contreras, envió una carta al presidente del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, Ruhakana Rugunda, para hacer de su conocimiento "las amenazas y actos de provocación realizados por el presidente de Venezuela, con motivo de la sucesión presidencial recientemente efectuada conforme a nuestro ordenamiento jurídico interno".

López le informó a Rugunda que el pasado 1 de julio Chávez amenazó con enviar "fuerzas militares venezolanas a Honduras presuntamente con el propósito de realizar una intromisión en los asuntos internos de Honduras, en abierta violación a los principios de la igualdad soberana de los Estados, el respeto a su integridad y soberanía y el de la no injerencia en los asuntos internos".

En tanto, los presidentes de Bolivia, Ecuador, Paraguay y Venezuela coincidieron en La Paz en que una próxima asamblea general de la OEA debe desconocer cualquier elección en Honduras que organice el régimen de facto en ese país.

Se trata de sentar un precedente y de impedir que tenga éxito "la maniobra política de los golpistas" que pretenden "ganar tiempo" para llegar a elecciones y superar de esa manera la crisis generada por el golpe de estado a Manuel Zelaya.

"No se reconocerá a ninguna autoridad que nazca de elecciones realizadas por una dictadura, para que vean los golpistas que no tienen ninguna salida para su acción ilegal", informó el presidente ecuatoriano, Rafael Correa.

El acuerdo para pedir una asamblea general de la OEA con ese objetivo fue tomado por la mañana en conversación previa al desayuno que tuvieron los cuatro presidentes que llegaron a La Paz para la conmemoración del bicentenario de la revolución libertadora del 16 de julio de 1809.

Correa dijo: "sabemos que Zelaya ha de regresar y que está dispuesto a morir por su tierra", en una conferencia de prensa en la que denunció también que en Honduras actualmente "hay asesinatos selectivos".

En coincidencia con el presidente venezolano, Hugo Chávez, el gobernante ecuatoriano sostuvo que "no se puede creer" que el gobierno norteamericano no haya conocido que en Honduras se estaba preparando un golpe contra Zelaya.

Correa recordó que Estados Unidos mantiene una base militar en Honduras y reconoció "la indudable influencia" que tiene en Centroamérica, por lo que demandó al presidente Barack Obama "una posición más firme" frente al régimen de facto de Roberto Micheletti.

Por su parte, López también denunció la "violación" del espacio aéreo de Honduras, el 5 de julio, por parte de un avión venezolano, tripulado por "pilotos militares", que traía de regreso al depuesto presidente Manuel Zelaya, derrocado el 28 de junio por un golpe militar y expulsado del país.

Indicó que el avión desobedeció la prohibición de la Dirección General de Aeronáutica Civil de sobrevolar el espacio "intentando aterrizar en el aeropuerto internacional de la capital".

Según López, la situación interna de Honduras "derivada de la sucesión constitucional se encamina, mediante el diálogo, a una pronta solución, la que podría verse comprometida de persistir esas acciones que pareciera desean provocar un baño de sangre".

Señaló que el gobierno de facto que preside Roberto Micheletti presentó el 6 de julio su "enérgica protesta" ante el gobierno de Venezuela, y ahora hace del conocimiento del Consejo de Seguridad los "hechos violatorios de los artículos 1 y 2 de la Carta de las Naciones Unidas, a fin de que se digne adoptar las medidas que la misma contempla".

Micheletti decidió mantener el toque de queda, que había sido suspendido el domingo y restablecido el miércoles, ante el aumento de las acciones de protestas de las organizaciones populares que exigen la restitución de Zelaya.

Las aduanas en las fronteras con Guatemala, El Salvador y Nicaragua fueron paralizadas por los manifestantes, igualmente Tegucigalpa, San Pedro Sula y otras ciudades importantes del país estuvieron incomunicadas por varias horas por el bloqueo de las carreteras, lo que impidió también el paso hacia los puertos del Caribe.

Juan Barahona, dirigente del Bloque Popular, dijo que el Frente Nacional de Resistencia Contra el Golpe de Estado decidió realizar acciones similares, y que la presión se intensificará hasta que Zelaya retorne a Honduras.