El diente de león recibe también los nombres comunes de amargón, achicoria serrana, pili-pili, taraxaco o tañi y en francés se llama “pissenlit”. Crece en climas templados y frígidos. Silvestre o cultivado siempre es bien apreciado en las ensaladas y por sus usos medicinales. Pertenece a la familia de las Asteráceas. Esta planta tiene raíz fusiforme, hojas lisas y dentadas algo semejantes a las de la achicoria y una especie de tallo muy tierno y hueco que remata en una flor de color amarillo. Todo el vegetal tiene un sabor ligeramente amargo.

Usos medicinales:

• Esta planta es laxante (evita el estreñimiento).
• Depurativa (purifica la sangre) combatiendo así las erupciones de la piel como barritos, pruritos, espinillas y furúnculos.
• Digestiva (mejora las digestiones lentas evitando a la vez esa sensación de pesadez), además provoca el apetito.
• Diurética (activa la función de los riñones) limpiando el cuerpo de toxinas e impurezas, especialmente expulsa el exceso de ácido úrico que es uno de los factores de la gota y de la artritis.
• Hepática (descongestiona y cura el hígado), combatiendo de esta manera la ictericia o derrame biliar (piel y ojos amarillentos).
• Esta planta además desinflama el baso y combate la diabetes (azúcar en la sangre y en la orina).
• Para provocar el apetito y facilitar la digestión, se toma una cuchara del zumo de esta planta antes de los alimentos.
• Para curar las enfermedades del hígado, el bazo, para purificar la sangre, expulsar el exceso de ácido úrico, se toma tres copitas por día, del zumo de este vegetal. En la misma forma se toma para combatir la diabetes.
• Para combatir el paludismo (malaria) se toma, poco a poco, dos vasos por día de diente de león.
• Como laxante se toma medio vaso de zumo y como purgante se toma un vaso de zumo (jugo puro) en ayunas.
• El látex blanco que emana de esta planta hace desaparecer las verrugas y los cayos.
• Para hacer baños de diente de león, se prepara una decocción de 300 a 500 gramos de toda la planta y se coloca en una ponchera llena de agua. Este baño produce la expulsión de todas las sustancias morbosas y extrañas, fortificando también todo el organismo entero, especialmente en las glándulas y nervios.

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