¡Vive Mejor! Haz como los pájaros: comienza el día cantando.
La música es alimento para el espíritu.
Canta cualquier cosa, canta desafinando, pero canta.
Cantar dilata los pulmones y abre el alma para todo lo bueno.
Si insistes en no cantar, por lo menos escucha mucha música y déjate llevar por ella.
Ríete de ti mismo. Es el comienzo para ser feliz.
Ríete abiertamente para que todos se puedan contagiar de tu alegría.
No te dejes abatir por los problemas. Si tratas de convencerte de que estás bien, terminarás convenciéndote de que realmente lo estás, y cuando menos lo pienses te vas a sentir realmente bien.
El buen humor, así como el mal humor, se contagian.
¿Cuál de ellos vas a escoger?
Si estás de buen humor, las personas a tu alrededor también lo estarán y lo necesitan, como tú.
Lee libros, lee poesía; la poesía es el arte de aceitar el alma.
Lee novelas, historias de amor, todo lo que reviva tus sentimientos.
Camina, corre, salta... El peso de la cabeza es muy grande, contrabalanceálo con algo.
Y te vas a sentir mejor, más animado, más joven.
Encara tus obligaciones con satisfacción.
Es maravilloso disfrutar lo que se hace.
Pon amor en todo lo que está a tu alcance.
Cuando te propongas hacer algo, ¡metete de cabeza!
No dejes escapar las oportunidades, no vuelven.
Ninguna barrera es infranqueable si estás dispuesto a luchar contra ella.
No dejes que tus problemas se acumulen, resuélvelos lo antes posible.
Habla, conversa, explica, discute y perdona: el silencio mata.
Exterioriza todo, deja que las personas sepan que las estimas, que las amas, que las necesitas.
¡AMAR NO ES VERGÜENZA, por el contrario, ES LINDO!
Vuelve a las cosas puras, dedícate a la naturaleza.
Cultiva tu interior y ella hará que brote belleza de todos tus poros.
No seas aburrido(a). ¡Tu puedes! Todos podemos.
Entonces. Vamos "A Vivir Mejor"
Fuente: Carmen Teresa Domínguez Romero.
e-mail: prof.cazabonne@hotmail.fr