- UE llama al diálogo en Honduras
- Ejército preparaba asaltar sede diplomática

En la sede de la embajada de Brasil donde se encuentra el depuesto Presidente de Honduras, Manuel Zelaya Rosales, luego de ingresar al país por tierra desde El Salvador, el 21 de Septiembre, hay dificultades para los que están adentro. Un total de 300 personas seguidoras del presidente constitucional de Honduras están acompañándolo en la sede de la Embajada de Brasil en Tegucigalpa, la Capital de Honduras, en Centroamérica. La policía del presidente de facto, Roberto Micheletti, tiene rodeada la sede diplomática y cortó el suministro de agua y de luz eléctrica. Impide el acceso al edificio de la Cruz Roja hondureña.

En la embajada de Brasil esta el depuesto presidente Zelaya junto a su esposa Xiomara Castro y su pequeño hijo quienes tienen varias horas de no comer, ni consumir agua. El conocido activista defensor del medio ambiente, el sacerdote de apellido Tamayo, dijo que las galletas se agotaron. Los servicios higiénicos están topados y se corre con el peligro de que se de una propagación de las epidemias entre los que están en el lugar.

Hay informaciones que señalan de forma extraoficial de que el presidente de hecho hondureño, Micheletti, tiene intenciones de usar al ejército para que ingrese en horas de la noche a la sede de la embajada de Brasil. Las tropas de asalto buscarían como matarlo y presentarlo como un supuesto suicidio, denunció el presidente Zelaya ante canales de televisión de Honduras. El mandatario teme por su vida. El funcionario Gustavo Villanueva de la Cancillería de Honduras que acompaña a Zelaya dijo que se hablan de negociaciones para trasladar a Mel de la embajada de Brasil a la de Estados Unidos.

La Unión Europea llama al diálogo

La Comisaria para Relaciones Exteriores y Política de Vecindad Europea Benita Ferrero-Waldner, sobre la situación en Honduras dijo lo siguiente, según traducción no oficial enviada al diario La Jornada, en el sitio de internet www.lajornadanet.com por Pedro Mucciolo, oficial de prensa e información de la delegación de la comisión europea para América Central y Panamá.

Desde el principio de la crisis que afecta a Honduras, he llamado al diálogo entre todas las partes como la única manera de llegar a una solución.

Yo permanezco profundamente convencida de que todas las partes tienen que abstenerse de cualquier acción que pueda llevar a un aumento de las tensiones, y de la necesidad que se entable un diálogo significativo lo antes posible.

Ahora más que nunca, es esencial que los Señores Zelaya y Micheletti, pero también los sectores legislativo y ejecutivo, así como los candidatos en las próximas elecciones presidenciales, se unan en un esfuerzo común en favor de una solución mutuamente acordada, basada en el Acuerdo de San José y con el apoyo de la OEA y de los demás países centroamericanos.

La crisis ha tenido un precio alto para Honduras en términos humanos, pero también en términos políticos y económicos.Su solución no puede esperar más, señala la Comisaria de Relaciones Exteriores y política de vecindad europea Benita Ferrero –Waldner.