El mandatario depuesto el 28 de junio pasado por un golpe de estado, las nuevas medidas adoptadas por el gobierno de facto demuestran que los golpistas "nunca han pretendido llevar a cabo elecciones". (FOTO CORTESIA)
Zelaya califica de criminal al estado de sitio
TEGUCIGALPA.- El presidente de facto de Honduras, Roberto Micheletti, aseguró que revisará la suspensión de las garantías constitucionales en el país y prometió que los militares no invadirán la embajada de Brasil, donde el depuesto presidente Manuel Zelaya está refugiado desde el 21 de septiembre.
El golpe de Estado en Honduras cumplió este lunes tres meses y el Frente Nacional de Resistencia Contra el Golpe de Estado realizó una manifestación en las instalaciones de la Universidad Pedagógica Nacional.
La manifestación fue acordonada por un nutrido pelotón de militares y policías en cumplimiento al decreto del estado de sitio, pero en horas de la tarde recorrió el Bulevar de las Fuerzas Armadas. Micheletti ordenó este lunes el cierre del Canal 36 de televisión y Radio Globo, los dos únicos medios de comunicación que transmitían informaciones del Frente Nacional de Resistencia Contra el Golpe de Estado, del presidente Zelaya y de la situación en el interior de la embajada de Brasil.
"Quiero enviarle a (Luiz) Lula da Silva (presidente de Brasil) un fuerte abrazo, con el cariño y el respeto que siempre le tenemos a los países del mundo, y que no se preocupe, que jamás nuestra policía, nuestro ejército, va a introducirse a la fuerza a sus dominios, a su terreno, a su propiedad", expresó.
Micheletti ofreció una conferencia de prensa luego que una comisión del Congreso Nacional le visitó para pedirle que derogue el decreto que suspendió las garantías constitucionales y fue usado este lunes para clausurar varios medios de comunicación.
Zelaya califica de criminal al estado de sitio
Por su parte el presidente depuesto de Honduras, Manuel Zelaya, calificó de "criminal" el Estado de Sitio decretado por el gobierno de facto y pronosticó que la medida llevará a su país "al abismo económico y político".
En declaraciones a la emisora mexicana W Radio, Zelaya manifestó su "indignación por la tragedia que está viviendo" Honduras y lanzó un "llamado urgente a la comunidad internacional para que actúe con la mayor diligencia posible para evitar un mayor derramamiento de sangre".
Respecto a la decisión del gobierno de facto de cerrar el Canal 36 de televisión y Radio Globo, el mandatario constitucional dijo que han sido silenciadas "las dos únicas voces que tenía el pueblo para manifestar lo que estaba pasando".
Zelaya dijo que permanecerá en la embajada de Brasil y señaló estar dispuesto a "enfrentar cualquier riesgo con tal de que Honduras retorne a la paz y los golpes de Estado no se repitan nunca más en ningún lugar de América".
Según el mandatario depuesto el 28 de junio pasado por un golpe de estado, las nuevas medidas adoptadas por el gobierno de facto demuestran que los golpistas "nunca han pretendido llevar a cabo elecciones".