Ortega recibió a Chinchilla no a la hora acordada, pero si el mismo día convenido. El recibimiento se efectuó en el aeropuerto Augusto C. Sandino. (foto J. Cajina)
Hablaron de “agenda común” y del reingreso de Honduras al SICA
La presidenta electa de Costa Rica Laura Chinchilla y el mandatario nicaragüense, Daniel Ortega, se reunieron ayer al final de la jornada, para discutir temas comunes que son “polémicos” para ambos países, los cuales estarán en agenda a partir del 8 mayo cuando la política costarricense asuma el poder.
Nicaragua y Costa coincidieron que se deben fortalecer las relaciones entre ambas naciones, por lo cual acordaron que en noviembre se volverán a encontrar en la ciudad costarricense de Guanacaste para reactivar una comisión bilateral que no se reúne desde hace dos años.
"Tenemos agendas comunes, puntos en los que debemos ir avanzando para superarlos: todos conocemos lo polémico de algunos temas", dijo Ortega en el aeropuerto Sandino al momento de recibir a Chinchilla.
Chinchilla reconoció que ambos países enfrentan "grandes desafíos que de no manejarse de manera adecuada podrían, más bien, afectar y debilitar las relaciones".
Ortega y Chinchilla, también acordaron establecer mesas de trabajo en las áreas de turismo, seguridad pública, combate al narcotráfico, crimen organizado y medio ambiente.
"Lo importante es que tenemos voluntad de trabajar por superar los puntos pendientes en la agenda", agregó el gobernante nicaragüense.
Hablaron del SICA
Ambos políticos abogaron por reintegrar a Honduras al Sistema de Integración Centroamericano (Sica), antes de la próxima Cumbre entre América Latina y Europa.
Honduras salió del SICA, producto del Golpe de Estado el pasado 29 de junio que expulsó del gobierno al entonces presidente hondureño, Manuel Zelaya.
Ortega resaltó que para “normalizar” la situación con Honduras se requiere "superar" la resolución que el SICA adoptó contra el gobierno del entonces presidente de facto de Honduras, Roberto Micheletti, a raíz del golpe de Estado contra Zelaya.
Aunque en un principio se resaltaba que el fin de la visita de Chinchilla a Nicaragua era para invitar a Ortega a su toma de posesión, ninguno de los mandatarios mencionó nada.