Ninguno de los diez magistrados del Consejo Supremo Electoral (CSE) asistió a la Sesión Inaugural de la Asamblea Nacional, celebrada el sábado.

Los diputados de tres bancadas liberales habían advertido a los magistrados que iban a sufrir “sorpresas” en caso de que se presentaran al parlamento.

Entre las “sorpresas” que había contra los magistrados electorales figuraba una declaratoria de “non gratos”, por parte de los diputados.

Los magistrados electorales son acusados por la oposición nicaragüense de cometer un supuesto fraude en la votación municipal del año 2008.

Pese a que el magistrado electoral de tendencia sandinista, José Luis Villvicencio, había dicho el pasado jueves al Canal 12 de televisión local que no había temor para asistir al congreso, a última hora ninguno de los funcionarios atendió la invitación oficial.

Los diez magistrados electorales terminan su período de cinco años entre febrero y junio del 2010.

Los diputados opositores anunciaron que no votarían a favor de la reelección de ninguno de esos funcionarios.

Pero el Presidente Daniel Ortega emitió el sábado un decreto, prorrogando en sus cargos a los magistrados electorales, judiciales y a los contralores, mientras el congreso no escoja a nuevos funcionarios o reelija a lo actuales.