Para la comunidad judía
La comunidad judía de Brasil cargó fuerte contra el gobierno de Luiz Inácio Lula Da Silva luego de que defendiera una salida negociada a la disputa entre Irán y Occidente en torno al programa nuclear de Teherán en lugar de presionar con nuevas sanciones como lo han propuesto las potencias mundiales.
En declaraciones a la Agencia Judía de Noticias, el vicepresidente ejecutivo de la Federación Israelita de San Pablo, Ricardo Berkiensztat, afirmó que “Brasil se está quedando solo en su intento por seguir buscando un diálogo con Irán, que cada día que pasa adopta una posición más difícil de volver”.
La comunidad judía de Brasil cargó fuerte contra el gobierno de Luiz Inácio Lula Da Silva luego de que defendiera una salida negociada a la disputa entre Irán y Occidente en torno al programa nuclear de Teherán en lugar de presionar con nuevas sanciones como lo han propuesto las potencias mundiales.
“Es un tema difícil y Brasil tiene su posición de dialogar con todos, pero nosotros estamos mirando, no somos expertos, pero con Irán es muy difícil de dialogar. Todos intentaron hablar con Irán y no consiguieron nada”, lamentó el dirigente comunitario.
La polémica estalló luego de que el canciller brasileño, Celso Amorim, ratificará la decisión del gobierno de Lula Da Silva de mantener abierta las negociaciones con el gobierno que encabeza Mahmoud Ahjmadinejad.
"Aún hay posibilidades de diálogo", dijo el ministro de Relaciones Exteriores en declaraciones realizadas en Brasilia.
El funcionario defendió el derecho de la república islámica de acceder a programas nucleares.
"No queremos que Irán tenga armas nucleares, no tengan duda de eso. Ellos tienen derecho a un programa (nuclear) pacífico como los otros países", argumentó.
Sin embargo, para la comunidad judía brasileña es el momento de “una presión más fuerte y Brasil no está aceptando eso”.
Berkiensztat insistió con que “Brasil se está quedando solo” en defensa del diálogo con Irán, “tal vez con Venezuela, que ahora no es un partido muy interesante”.
“Estoy en contra de la posición del gobierno de Brasil de mantener el diálogo con Irán”, subrayó el dirigente comunitario.
Siempre en diálogo con esta agencia, Berkiensztat desestimó que la posición de Brasil pueda tener algún peso en el escenario político internacional.
“Brasil tiene su fuerza pero no se compara con las potencias del Consejo de Seguridad de la ONU. Los países grandes no van a tener muy en cuenta la posición de Lula”, señaló el dirigente.
Además consideró que Brasil “puede colaborar (en la búsqueda de la paz en Medio Oriente), pero está colaborando de una manera errada, intentando dialogar con alguien que no quiere el diálogo”.
Berkiensztat expresó que espera que Brasil mantenga “hasta un punto su búsqueda del diálogo” y prevea que “Irán está buscando jugar con la diplomacia internacional porque el presidente en un momento hace una cosa y en otro momento hace otra”, señaló.
Por último, el directivo enfatizó que Ahmadinejad “es una amenaza muy fuerte contra el mundo occidental y contra Israel” y consideró que “Brasil tiene que percibir que hasta cierto punto se puede pensar en dialogar, pero delante de esa línea roja no se puede más dialogar”.